lunes, 31 de diciembre de 2007

Inventor

Quisiera inventar una palabra. Lo ideal sería una palabra que nombrara un concepto nuevo. El gran concepto. Algo que estuviera entre libertad y felicidad, por ejemplo. Pero lo veo difícil. Se necesitaría un filósofo o algo así. Hay precedentes: La palabra nostalgia (me hubiera gustado inventarla yo) la acuñó el suizo Johannes Hofer en 1688 en su tesis médica. Así que quizás me debiera conformar con inventar una palabra que añada un matiz a otra ya existente. Por ejemplo para nombrar a una brisa que trajera aromas de flores. ¿No sería una gran brisa y una gran palabra si diera con ella?.

sábado, 29 de diciembre de 2007

Misterio, intriga, dolor de barriga

No sólo es difícil conocer las respuestas, sino que además es desaconsejable. Comentaba Einstein: "La cosa más hermosa que podemos experimentar es el misterio. Es la fuente de todo arte y ciencia verdaderos". Por su parte Miguel de Unamuno hablaba (habla, porque lo dejó escrito) de la doctrina de la feliz incertidumbre. Creo que venía a decir que es mejor no saber si Dios existe o no. Lo que nos mantiene vivos es la incertidumbre. La certeza, en cualquier sentido, sería insoportable. Y por cierto; lo que de verdad nos preocupa no es si Dios existe o no, sino si nosotros existiremos después de la muerte o no. ¿Qué será será?.

viernes, 28 de diciembre de 2007

Con la p

El escritor ruso Nikolái Kultiápov va a escribir (o ya ha escrito, no está claro) una novela en la que todas las palabras empiezan por p. Hoy es 28 de diciembre, pero la noticia la leí ayer día 27. El protagonista se llama Pavel Petrov. Hasta ahí sin problema, Pablo Pérez. Pero hay que seguir hasta 40.000 palabras. Proclamo perplejidad por proyecto portentoso. Para poder preparar plan pido pasta. Pienso parar pronto. Punto.

Sorridere

Los hijos se parecen a los padres. Es natural. Pero es que los perros también se parecen a sus dueños. Los hijos adoptados se parecen a sus padres adoptivos. Ya no es el ADN, es la alimentación, las costumbres, el ejemplo, "lo que ven en casa los chavales". Ahora he descubierto fascinado la posibilidad de que me parezca a mi madre en mi forma de sonreir. No puedo imaginar mejor herencia.

miércoles, 26 de diciembre de 2007

Comienzo de un relato no norteamericano

Nunca he estado en Wisconsin. Ni en ningún otro sitio de ese continente. Así que quizás hubiera sido más prudente empezar la historia en algún lugar más cercano. Pongamos que en La Rioja o en la ribera del Duero. Un sitio que produzca vino. Es que el motivo de ir allí fue que a mi madre le ofrecieron un trabajo atendiendo a los visitantes a una bodega. Les guiaba en un pequeño tour por las instalaciones y luego les obsequiaba con una cata acompañada de chorizo y queso para picar. Muy pocos se iban sin comprar al menos una caja de botellas. La bodega estaba a las afueras y a veces a media mañana yo iba a acompañarle y a comer juntos. Por el camino pasaba por una calle de antiguas casas con jardín. Una calle tranquila flanqueada por árboles (creo que eran álamos) altos y con los troncos pelados y llenos de muescas, corazones incluidos. Desde el primer día algo me llamó la atención en la última casa de la calle...

lunes, 24 de diciembre de 2007

Purposes

Mis propósitos para el año nuevo: No hacer propósitos de año nuevo. Mis propósitos de entretiempo: Hacer ejercicio, o sea seguir haciéndolo. Que los pequeños contratiempos sean eso, pequeños contratiempos. Apreciar las cosas sencillas. Sonreir a la gente. Seguir aprendiendo (sin prisas). Dormir ocho horas diarias. Espero no haberme puesto el listón demasiado alto.

domingo, 23 de diciembre de 2007

23 de diciembre

Siempre se me ha hecho extraña la sensación de alegría a fecha fija. También soy consciente de que las navidades es la época más triste del año para mucha gente, para una minoría que puede ser inmensa. No tengo nada en contra de que las familias se reunan, y menos aún de que los niños se ilusionen con los regalos. Leí que estas fiestas en torno a los días más cortos del año vienen sencillamente de la necesidad de los hombres de juntarse y comer y beber para escapar del frío, de la noche, del miedo a lo desconocido. Antes la gente trabajaba duro y necesitaba literalmente el descanso. Ahora yo tengo la impresión de que es fiesta todo el año. Dos consejos de un psiquiatra para las reuniones familiares: Acepta a tus familiares como son y no te dejes llevar por una euforia exagerada (aunque de todas formas no estará mal que hagas un poco el tonto). En último caso soy optimista; a partir de hoy el día, las horas de luz, empieza a alargarse.

sábado, 22 de diciembre de 2007

Mucho y poco

Llegó la hora de los brindis. Como era de esperar le pidieron que dijera unas palabras. Bueno, le dijeron "que hable, que hable". Sonreía y le guiñó un ojo a alguien a mi espalda. Estaba decidido a no hablar. Uno le dijo en voz baja, animándole, "venga, ¿que podrías decir?". Y él contestó, también en voz baja, "mucho y poco". Mucho y poco. Me gustó la respuesta. Me imaginé a qué se refería. A lo mucho que podría hablar sobre los últimos años, sobre los malos tragos, sobre las amistades hechas, sobre los momentos compartidos. Y lo poco que diría si en último caso se veía obligado a hablar. Porque bastaba el gesto, las miradas. Porque es dificil expresar según qué cosas con palabras.

viernes, 21 de diciembre de 2007

Pues sí, ¡feliz Navidad!

Mi rey mago preferido fue Melchor. Baltasar ya estaba elegido. Ibamos a buscar musgo para el nacimiento. El río era un papel azul cubierto por un cristal. Los reyes iban avanzando día a día hacia el portal. Cuando veíamos pasar un avión dejando una larga estela de humo, decíamos que era el avión de los reyes, y que la cola era donde llevaban los regalos. Un chaval proclamó a voces que los reyes no existían y yo lo sentí por mi hermano pequeño que aún no lo sabía. Dejábamos los zapatos para saber qué regalo era para cada uno y una copita de anís para los reyes (nada de agua para los camellos). Una para cada uno, tres. Siempre me preguntaba si no serían muchas en realidad. Un año, uno de los regalos fue un disco que contaba un cuento de Navidad; un cuento muy triste que nos daba miedo. Yo pedía indios, vaqueros, romanos. Luego los guardaba en una caja de galletas en la cocina, junto al fregadero.

jueves, 20 de diciembre de 2007

Mientras me cortan el pelo

Las tijeras bailan a centímetros de mis ojos, chas , chas, y casi como un reflejo instintivo de protección los cierro. Me siento flotar. Soy un submarino que navega por la superficie. Digo submarino adelantándome en el tiempo, porque al cabo de un rato me sumerjo y ahora floto entre dos aguas, y entonces sí soy un submarino. Todo tiene una claridad verdosa. Y me pregunto, ¿cómo es que estoy debajo del agua y sigo respirando?. Abro los ojos. La peluquera me coge el pelo entre los dedos y lo va recortando poco a poco. Cierro los ojos. Respiro acompasadamente. Me dormiría.

miércoles, 19 de diciembre de 2007

Fragmentos escogidos

Todos los días son propicios para aprender algo. Sabía que Oliver Sacks era médico y que había escrito un libro titulado "El hombre que confundió a su mujer con un sombrero", algo que intuía relacionado con el surrealismo (el encuentro fortuito de un paraguas con una máquina de coser sobre una mesa de disección, según Breton). Ahora me entero que es neurólogo y que ese libro trata de un hombre que padece agnosia visual (que es no reconocer lo que se ve), y de otros cinco casos clínicos. Oliver Sacks también ha hablado de otra cosa que yo intuía con algo más de acierto: "Cada persona con una identidad coherente está narrándose a sí misma la historia de su vida todo el tiempo". Eso es; una voz en off que me va diciendo todo lo que siento, lo que me espera hoy, a que hora comeré, los nervios de ayer, la llamada telefónica, que está nublado, mi hermana que viene en avión, voy a escribir esto en el blog, estiro los músculos del cuello, y así noche y día porque el cerebro no para (solo cambia consciencia por subconsciencia o inconsciencia). A veces, para empezar el día, ralentizo la velocidad y hago que la voz sea cálida y persuasiva (en mi imaginación) y sea en efecto la voz en off de mi película. Entonces puedo escuchar esa voz sobre un plano general y aéreo de la ciudad. Según hablo (con esa nueva voz que encandila) la cámara se va acercando y cerrando sobre un barrio, y luego sobre una casa, hasta que entra por mi ventana y me encuadra tecleando un fragmento escogido en mi ordenador.

martes, 18 de diciembre de 2007

If I give my heart to you...

El corazón es un cazador solitario. Carson McCullers. El corazón es una presa solitaria. Si te encuentras con uno, trátalo con cuidado. Que no se rompan los sentimientos que guarda. Que pueda recogerse a la noche y seguir soñando. El corazón late cien mil veces al día y nos marca el ritmo de la vida. Si tienes un corazón a tu lado, siéntelo en las yemas de tus dedos. Es frágil, es sensible al cariño y al desprecio. Haz que tu mirada, tu sonrisa, tus palabras le acaricien. El corazón es como un niño valiente. Atrevido y vulnerable a la vez. Saldrá en busca de aventuras y se asustará. Cuidemos los corazones. ...will you handle it with care?.

lunes, 17 de diciembre de 2007

Monos

Dice el paleoantropólogo Arsuaga que seguimos siendo monos. Sí, somos un tipo de mono. Por eso se entiende que haya una empresa que ofrece encontrar pareja basándose en el olor (a través del ADN). A veces me sorprenden los hechos más elementales de la vida. De la nuestra y la de los demás monos. Por ejemplo que nuestras actividades básicas son comer y dormir. Debería haber una asignatura fija en todos los cursos de nuestro aprendizaje que insistiera en esos conceptos que parece que se dan por archisabidos y que nos definen por encima de todo. Que somos monos, que comemos y dormimos, que vivimos en grandes colonias, que nacemos, crecemos, nos reproducimos y morimos. Es que se nos olvida.

domingo, 16 de diciembre de 2007

Radio Nostalgia

A veces la sintonizo, pero algo me dice que no debo abusar de la nostalgia. Hermana de la melancolía, prima carnal de la tristeza, y mentirosa compulsiva. Cualquier tiempo pasado fue anterior y los recuerdos son sospechosamente selectivos. Cogí en la biblioteca un libro de Paul Auster: "Experimentos con la verdad". El título puede sonar cien por cien Auster... pero no es suyo. Se lo ha puesto el avispado editor a una recopilación de textos de Auster (prólogos, artículos, entrevistas). Dudo que el propio Auster hubiese citado a la verdad para nada. La verdad, o es muy huidiza o no existe. Y este principio se aplica corregido y aumentado a los recuerdos. No me fio de mis recuerdos.

viernes, 14 de diciembre de 2007

Sutiles diferencias

Como cada día Javier tantea en la mesilla para encontrar el despertador que avisa con pitidos cada vez más seguidos que son las siete y veintiocho minutos de la mañana. Acerca la esfera luminosa a los ojos para atinar con el botón "detener" e incorporándose de un golpe pasa a la posición de sentado en el borde de la cama. La oscuridad reina aún en la habitación.
Ahora bien, ¿por qué lado de la cama se ha levantado Javier?. Si nos tumbamos boca arriba en la cama, Javier se ha levantado por el lado izquierdo. El lado de la ventana, que está orientada hacia el norte. Pero no lo había dicho, por lo que cualquier lector podría muy bien haber imaginado que Javier se ha levantado por el lado derecho. No creo, desde luego, que tenga la menor importancia con que pie se haya levantado Javier. Incluso teniendo en cuenta que Javier soy yo. Sólo digo que mi realidad ha empezado a izquierdas y la del lector se ha ido simétricamente a la derecha, en un universo simétrico en el que Javier es zurdo. No importa; un poco más tarde cuando Javier se tome el vaso de leche en la cocina, echará un vistazo al reloj de pared (adelantado unos cinco minutos) y entonces el lector puede muy bien suponer que el reloj está a su izquierda, cuando en realidad está a su derecha. De este modo el lector hará ingresar a Javier en otro universo simétrico que coincidirá, excepto sutiles diferencias, con el imaginado (más que vivido) por el propio Javier. O sea por mí.

jueves, 13 de diciembre de 2007

Vivir para olvidar

Suelen decir que al levantarse de la mesa después de comer hay que tener todavía un poco de hambre. Me doy cuenta de que cualquiera de mis días se compone de dosis más o menos medidas de diversas cosas y si consigo repartir equitativamente mi tiempo me encuentro mejor (soy simple). Lo que quiero decir, y me parece que no me estoy centrando, es que todo tiene su medida y también la memoria. El exceso de memoria es una maldición. Jean Follain (poeta francés que hasta tropezar con esta cita suya no conocía de nada) escribió: "En los campos / de su eterna infancia / vaga el poeta / deseando no olvidar nada". Nada olvidaba Funes "el memorioso" del cuento de Borges y era infeliz. Lo mejor es tener una buena mala memoria y así poder mantener el asombro con cada amanecer.

miércoles, 12 de diciembre de 2007

But seriously

Todo lo que decimos, lo decimos en serio. Cuando hablamos en broma también. Muchas veces aprovechamos un tono más ligero, decimos cosas riéndonos, porque no nos atrevemos o preferimos no decirlas de otra forma. Ahí entra también la ironía. Pensándolo bien no hay tema que no se pueda abordar con una sonrisa.

lunes, 10 de diciembre de 2007

Nieve, arena

He leído que Shakespeare cita doscientas cuarenta flores distintas en sus obras, mientras el francés Racine sólo utiliza la palabra "flor". Bravo por el bardo. ¿Cuántas palabras distintas tienen los esquimales para decir "nieve"?. 49 es una cifra tan buena como cualquier otra. 48 si descontamos la palabra "agua" que utilizan para designar a la nieve derretida. En todo caso es una bonita creencia, sobre todo porque hablamos de algo tan poético como la nieve. Sería de suponer que en el Sahara los tuaregs tienen al menos 24 palabras distintas para decir "arena". Inuit es el nombre con el que los esquimales se refieren a sí mismos. Significa "la gente", término muy apropiado. ¿Cuántos pueblos de la tierra se refieren a sí mismos como "los hombres"?. Casi todos, menos aquellos que prefieren llamarse "los superhombres". ¿Cuántas palabras distintas tendrán los inuit para decir "hielo"?. Los esquimales del norte opinan de los del sur que son unos perezosos que se pasan las tardes al sol sin hacer nada.

domingo, 9 de diciembre de 2007

Protocolos

SMS son las iniciales de Short Message Service. Una vez estaba estudiando arquitectura de redes, esto es la comunicación entre ordenadores y los siete niveles del modelo OSI, del nivel físico al nivel de aplicación. A más de uno le sonará, a mí se me ha olvidado casi por completo. El caso es que salían multitud de iniciales en inglés, nombres de protocolos, de comités, de todo. Comencé a hacer una lista de estos términos, como el mismo OSI (Open System Interconnection) o por poner alguno famoso HTTP, DNS... Al de un tiempo tenía varios folios, y dedicaba parte de mi tiempo a leer revistas técnicas en busca de más. Pensaba (tenía esa fantasía) que cuando los tuviera todos (es un decir) podría publicar un librito, para el que ya tenía título, con la lista ordenada alfabéticamente de los términos con su significado en inglés y una traducción al castellano junto a una breve explicación de su por qué. Ya tenía título, pero se me ha olvidado. Empezaba por "glosario". Además pensaba incluir un chiste. Había un protocolo de nombre LAPD (Link Access Procedure D-Channel) y pensaba hacer una doble entrada con él. Una primera entrada con el chiste y la segunda ya la auténtica. Se ve en muchas películas, LAPD son las iniciales de "Los Angeles Police Department". La carpeta con aquellos folios se perdió en algún traslado.

sábado, 8 de diciembre de 2007

SMS

Encendí el móvil al salir a la calle por la mañana y me entró un mensaje. Lo abrí y decía: "¿A ti te importa?. Salgo a las cinco". Estuve confuso durante algunos segundos. ¿Me importa qué?, ¿quién sale a las cinco?. No encajaba con nada conocido. Comprobé el número del teléfono, y no era de ninguno de los sospechosos habituales. Alguien se había equivocado de destinatario. Seguí a mis cosas. Después de comer me encontré mirando por la ventana y pensando en el mensaje. Decidí que probablemente era un hombre el que lo había enviado (por el tono abrupto) y que la persona que no lo había recibido era una mujer. ¿No debería llamar al número del remitente y explicar la confusión?. Escribo destinatario y remitente como si fuera una carta, no se me ocurre otra cosa. ¿O sería mejor para todos, especialmente para ella (que ya era una mujer bella y misteriosa en mi imaginación) no llamar y que él se fuera efectivamente a las cinco?. Antes era más sencillo, sonaba el teléfono y tú descolgabas y decías: "¿Sí?". Y la otra voz: "¿Está María?". Y tú: "¿Qué María?", aunque no había ninguna María en todo el edificio. Y al final se disculpaba y ya estaba. A las cinco y un minuto me llegó otro mensaje. Era del mismo número desconocido. Lo abrí con un ligero temblor. Decía escuetamente "adiós". Tecleé torpemente, opciones, usar número, llamar (esta sucesión la conseguí sólo al cuarto intento). Tras un tono de llamada salió la voz esa que dice "el número al que llama está etc. etc."

viernes, 7 de diciembre de 2007

¿Bailamos?

"The Hammer Song" la compusieron Pete Seeger y Lee Hays en 1949. Era una canción militante que hablaba de construir un mundo más justo. Trece años después, en 1962, fue un gran éxito en la versión de Peter Paul & Mary (con el título "If I Had A Hammer"). En 1963 Trini López la aceleró un tanto y le añadíó algunos gorgoritos. En 1964 Rita Pavone grabó esta versión en italiano. La letra, de Sergio Bardotti, no tiene nada que ver con la original. Adjunto el texto con todas las onomatopeyas. Destaco dos momentos: Cuando habla de "quella smorfiosa" (aquella melindrosa) y cuando suspira "uffa". En You Tube hay una grabación de la época (recomendada) de la Rai Due.

DATEMI UN MARTELLO
(Bardotti / Hays e Seeger)

A-a-aah
A-a-aah
Du du du da
Du du du da
Du du du
Datemi un martello
Che cosa ne vuoi fare?
Lo voglio dare in testa
a chi non mi va, si si si
A quella smorfiosa
con gli occhi dipinti
che tutti quanti fan ballare
lasciandomi a guardare
eh eh che rabbia mi fa
um um che rabbia mi fa

Du du du da
Du du du
Eh eh datemi un martello
Che cosa ne vuoi fare?
Lo voglio dare in testa
a chi non mi va
A tutte le coppie
che stanno appiccicate
che vogliono le luci spente
e le canzoni lente
Che noia mi da, uffa
che noia mi da

Du du du da
Du du du
Eh datemi un martello
Che cosa ne vuoi fare?
Per rompere il telefono
l'adopererò
Perchè tra pochi minuti
mi chiamerà la mamma
il babbo ormai sta per tornare
a casa devo andare, uffa
che voglia ne ho, no, no, no
che voglia ne ho

Du du du da
Du du du
U-un colpo sulla testa
a chi non è dei nostri
così la nostra festa
più bella sarà, eh eh eh
saremo noi soli
saremo tutti amici
fa-aremo insieme i nostri balli
il surf e l'hully-gully, ah ah
che forza sarà, eh eh
che forza sarà, du du du du du
che forza sarà, o no,no,no,no,no
che forza sarà, ci can ci can
ci can ci can
ci can ci can
ahiiiiii!

Datemi Un Martello - Rita Pavone

Danger

Por alguna extraña razón (for some strange reason) el idioma de fondo de este blog ha cambiado al inglés. He intentado volver al castellano y no lo he conseguido (piove, porco governo). Sí he llegado al pie de página donde dice: "Delete this blog". Supongo que si pinchas ahí te pedirá luego una confirmación, pero no he hecho la prueba. Me ha parecido demasiado peligroso. Too dangerous.

miércoles, 5 de diciembre de 2007

Tú también

¡Cómo quisiéramos ser diferentes!. La que se rebela contra las convenciones sociales. El que no hace lo que todos. La que se atreve a ser naturalmente única. El que escribe como nadie lo ha hecho antes (yo lo intento, pero no me sale). Los que formamos parte del club de los elegidos. ¡Cómo nos gusta que alguien nos diga: "Eres único"!. ¿Será que necesitamos a los demás desesperadamente?. ¿No me debería bastar con ser yo?. Con mis habilidades y mis torpezas, ni más ni menos que nadie. Asumiendo que soy mi mejor juez; el juez que si vienen mal dadas sabrá ser benévolo, generoso. Y si alguien me dice: "Eres único"; le contestaré: "Gracias, tú también".

martes, 4 de diciembre de 2007

Castillos en el aire

Día gris de diciembre y ayer encendieron las luces de Navidad. Hace ya meses que anuncian juguetes en las horas infantiles de la televisión y hace muchos años que ya no soy niño. Mi juguete preferido creo que fue la arquitectura de madera. Piezas de madera de colores cuyo único inconveniente era que eran pocas y no me llegaban para hacer los castillos que yo quería. Todavía hoy me gustaría construir un caserón como el de "el orfanato" con piezas de madera. Siempre pensaba que tenía que guardar las cajitas de cartón de medicamentos y alimentos y hacerme así con un arsenal que me permitiría levantar murallas y torres. Pero por temor a que no me dejaran acumularlas (¿síndrome de Diógenes?), nunca lo hice. Lluvia en un día gris de diciembre y sigo levantando castillos en mi cabeza.

lunes, 3 de diciembre de 2007

Cada día

Le preguntaron a un inglés (a un inglés famoso, pero no recuerdo el nombre) qué opinaba de los franceses y éste contestó: "No lo sé, no les conozco a todos". A mi me pasa lo mismo y no sólo con los franceses. Por eso leo el periódico, para conocer. Cada día le doy un vistazo a esa radiografía de la sociedad. Cada día encuentro algún hecho poco conocido, algún detalle conmovedor. También hago el sudoku.

La verdad del caso de los patitos amarillos

El 10 de enero de 1992 un buque perdió en mitad del Pacífico 28.800 patos, castores, tortugas y ranas de plástico. En 2006 el anuncio de un coche incorpora a los patitos amarillos como extras con el lema "una historia extraordinaria". La imagen de miles de patitos flotando a la deriva por el océano es desde luego entrañable. Uno desearía avistarlos un día e incluso desearles suerte. La verdad es mucho más prosaica. Entre agosto y septiembre del mismo año 1992, cientos de aquellos juguetes llegaron a las playas en torno a Sitka, Alaska. Con intervalos de tres años han seguido llegando a la zona, al parecer en sucesivos giros de las corrientes del Pacífico norte. Con los años los patitos amarillos eran casi blancos (igual que los castores rojos; tortugas azules y ranas verdes conservaban su color). La gran mayoría de los juguetes han desaparecido, seguramente convertidos en polvo de plástico. Aún así algunos escaparon del Pacífico y han llegado al Atlántico a través del Ártico. En 2003 un pato llegó en julio a Maine y en agosto una rana a Escocia. Creo que debemos admitir que los patos de plástico no destacan por su sentido gregario.

sábado, 1 de diciembre de 2007

Comienzo de un relato norteamericano

Acabábamos de mudarnos a un pequeño pueblo de Wisconsin. Mi padre había muerto. Esto es, mi madre y yo habíamos decidido que estaba muerto. Nos había abandonado (aunque, según mi madre, nosotros le habíamos abandonado a él) y luego había muerto lleno de remordimientos por habernos hecho la vida miserable. La verdad es que él salió hacia el este y nosotros hacia el oeste. Hubiera sido necesaria una minuciosa reconstrucción de los hechos para determinar quién había abandonado a quien. Era verano y aún faltaba un mes para el comienzo de curso...