jueves, 20 de diciembre de 2018

De verdes y dedos

Ronama Verazuñivi, la presidenta del congreso de diputados georgiano (no la Georgia con capital en Atlanta sino Georgia en el Caúcaso)... ¿A que cuela? Pues no, ronamaverazuñivi era la palabra (el truco mnemotécnico) que nos enseñó Cocón, nuestro profesor de Física en cuarto de bachiller, para que nos aprendiéramos los colores del arco iris. Cocón era un apodo, claro (también tenía seis o siete hijas y nos decía que buscaba candidatos entre nosotros para casarse con alguna de ellas). Los colores son rojo, naranja, amarillo, verde, azul, añil y violeta (el truco sigue funcionando). Me acuerdo de esto por la llamada "revuelta de los chalecos amarillos". Bien puede ser que cuando alguien señala con el dedo hacia donde sea, yo lo que miro es el dedo, having said that... los chalecos que he visto en los informativos de televisión me han parecido en su mayoría verdes, no amarillos. Sí, los hay amarillos, pero yo veo más verdes. Un verde chillón, fosforito, pero verde (que te quiero verde). ¿Dónde acaba el verde y empieza el amarillo? Se confunde primero un color y se acaba ni se sabe donde. Viendo los disturbios en París con la "torre" Eiffel de fondo reflexiono sobre colores, imágenes y metáforas (ese dedo, esa estructura metálica, apuntando al cielo) y me entran dudas de que sea una torre. ¿No está más cerca de ser una pirámide?, vale, vale, es una torre...