miércoles, 22 de mayo de 2019

Por la paz

En un recorte antiguo, creo que es una entrevista que le harían cuando recibió el Premio Nobel (de literatura), leo el titular, esta frase puesta en los labios de Patrick Modiano: "Nunca consigo escribir lo que quiero decir". Modiano, Premio Nobel, bien dicho. Otras dos cosas difíciles de conseguir, la predicción y el buen juicio. Me refiero a predecir y juzgar (me cuesta escribir lo que quiero decir). La predicción es complicada, sobre todo la del futuro (cita atribuida a Niels Bohr, no está claro que lo dijera). Lo mismo pasa con el juicio referido a los demás. Más accesibles (pero de dificultad no desdeñable) son la predicción concerniente al pasado y el juicio aplicado a uno mismo, no solo eso, sino que ademas es conveniente y recomendable poner interés y empeño en conocer el pasado y en conocerse a uno mismo. En cuanto a predecir el futuro y juzgar a los demás, mejor abstenerse. Nunca sabremos todas las circunstancias, ni para deducir lo que pasará mañana, ni para sentenciar o absolver un comportamiento. Y aún conocidas, recuerda a Modiano, puede que nos falte sabiduría. Más que nada lo digo por la paz.

viernes, 17 de mayo de 2019

Un día lluvioso en primavera

"¡Qué gran momento para estar vivos!", dijo. No dijo "vivo", dijo "vivos", esa es la clave. También dijo (o dijo otro), "la etimología es mi gran pasión". Ahí ya, hay opiniones. No está mal la etimología, no deja de ser una forma de navegar (de zambullirse, de aventurarse) en el mar de las palabras. Aceptamos etimología como bastón de ayuda para adentrarse en una frase procelosa. "Procelosa", de "pro" estar a favor y "celosa" que pone mucho celo, interés. Falsa prima etimológica, nada de eso (en la etimología hay mucho inventor frustrado). "Procelosa" viene de "procella", tormenta en latín, con el sufijo de abundancia "oso". Detrás de cada palabra hay otra(s) palabra(s). Detrás de cada ser vivo hay una gran pasión (o una pequeña pasión). La etimología de "pasión" no le hace justicia. "Pasión" indica un estado pasivo, lo contrario de la acción. Sentir pasión (etimológicamente) es padecer. No dejes que la etimología ciegue tus ojos. Sentir pasión es estar vivos, y desde luego hoy es un gran día para estarlo.

miércoles, 1 de mayo de 2019

Biblioteca personal

Bricolaje intelectual, cómo formar tu biblioteca personal. Empiezo por confesar que la principal característica de mi biblioteca personal es que no tengo biblioteca personal, o por lo menos nada que merezca tal nombre. Me gustan los libros (siempre me han gustado) y me gustan las bibliotecas personales, pero yo no tengo una. En este tema tengo el corazón dividido. Por un lado me encanta husmear en cualquier anaquel de libros, por otro ¿para qué coleccionarlos?, una vez leído que viva su vida donde mejor pueda y si, en el futuro, se me ocurre volverlo a leer, ahí está la biblioteca municipal (y algunas bibliotecas personales cercanas). Y, bueno, lo confieso, ahí están los libros digitales. Sí, el tacto y el olor del papel, también a mí me gustan, pero puedo pasar de ello sin trauma. Por supuesto tengo libros en casa, pienso que más que la media (la media es muy baja), pero no llegan a la masa crítica a partir de la cual podríamos hablar con convicción de una biblioteca personal. ¿Cuál es esa masa crítica? Yo la situaría en dos paredes (mínimo dos metros de largo) cubiertas de estanterías. Menos de eso no es suficiente, lo siento. En números, digamos 400 libros. No vale cualquier libro. Descártense regalos de la Caja de Ahorros, libros de cocina, de rutas turísticas, anuarios, la historia del Athletic y el libro Guinness de los récords. Y similares, ya ves por donde voy. Se trata de reunir los libros que te han gustado y los que crees que te podrían gustar. Ya se entiende que no tienes por qué habértelos leído todos (por definición un lector nunca podrá leerse toda una biblioteca), pero sí bastantes. Un buen número en esa cifra de 400 sería haber leído el cincuenta por ciento, 200. A medida que la biblioteca crece este porcentaje, por lógica, disminuye. Mi biblioteca personal ficticia sería sobre todo literatura, con sus variaciones novela, cuento, diarios, memorias, hasta algo de poesía (ya, que no doy la talla, es cierto). Luego en plan testimonial habría también historia, filosofía, biografías y alguna cosita más. Espero que estas indicaciones te hayan servido de ayuda para montarte en casa esa biblioteca personal que, sin duda, mejora el aspecto de cualquier hogar. La semana que viene en Bricolaje intelectual haremos una comparativa de religiones.