lunes, 31 de diciembre de 2007

Inventor

Quisiera inventar una palabra. Lo ideal sería una palabra que nombrara un concepto nuevo. El gran concepto. Algo que estuviera entre libertad y felicidad, por ejemplo. Pero lo veo difícil. Se necesitaría un filósofo o algo así. Hay precedentes: La palabra nostalgia (me hubiera gustado inventarla yo) la acuñó el suizo Johannes Hofer en 1688 en su tesis médica. Así que quizás me debiera conformar con inventar una palabra que añada un matiz a otra ya existente. Por ejemplo para nombrar a una brisa que trajera aromas de flores. ¿No sería una gran brisa y una gran palabra si diera con ella?.

sábado, 29 de diciembre de 2007

Misterio, intriga, dolor de barriga

No sólo es difícil conocer las respuestas, sino que además es desaconsejable. Comentaba Einstein: "La cosa más hermosa que podemos experimentar es el misterio. Es la fuente de todo arte y ciencia verdaderos". Por su parte Miguel de Unamuno hablaba (habla, porque lo dejó escrito) de la doctrina de la feliz incertidumbre. Creo que venía a decir que es mejor no saber si Dios existe o no. Lo que nos mantiene vivos es la incertidumbre. La certeza, en cualquier sentido, sería insoportable. Y por cierto; lo que de verdad nos preocupa no es si Dios existe o no, sino si nosotros existiremos después de la muerte o no. ¿Qué será será?.

viernes, 28 de diciembre de 2007

Con la p

El escritor ruso Nikolái Kultiápov va a escribir (o ya ha escrito, no está claro) una novela en la que todas las palabras empiezan por p. Hoy es 28 de diciembre, pero la noticia la leí ayer día 27. El protagonista se llama Pavel Petrov. Hasta ahí sin problema, Pablo Pérez. Pero hay que seguir hasta 40.000 palabras. Proclamo perplejidad por proyecto portentoso. Para poder preparar plan pido pasta. Pienso parar pronto. Punto.

Sorridere

Los hijos se parecen a los padres. Es natural. Pero es que los perros también se parecen a sus dueños. Los hijos adoptados se parecen a sus padres adoptivos. Ya no es el ADN, es la alimentación, las costumbres, el ejemplo, "lo que ven en casa los chavales". Ahora he descubierto fascinado la posibilidad de que me parezca a mi madre en mi forma de sonreir. No puedo imaginar mejor herencia.

miércoles, 26 de diciembre de 2007

Comienzo de un relato no norteamericano

Nunca he estado en Wisconsin. Ni en ningún otro sitio de ese continente. Así que quizás hubiera sido más prudente empezar la historia en algún lugar más cercano. Pongamos que en La Rioja o en la ribera del Duero. Un sitio que produzca vino. Es que el motivo de ir allí fue que a mi madre le ofrecieron un trabajo atendiendo a los visitantes a una bodega. Les guiaba en un pequeño tour por las instalaciones y luego les obsequiaba con una cata acompañada de chorizo y queso para picar. Muy pocos se iban sin comprar al menos una caja de botellas. La bodega estaba a las afueras y a veces a media mañana yo iba a acompañarle y a comer juntos. Por el camino pasaba por una calle de antiguas casas con jardín. Una calle tranquila flanqueada por árboles (creo que eran álamos) altos y con los troncos pelados y llenos de muescas, corazones incluidos. Desde el primer día algo me llamó la atención en la última casa de la calle...

lunes, 24 de diciembre de 2007

Purposes

Mis propósitos para el año nuevo: No hacer propósitos de año nuevo. Mis propósitos de entretiempo: Hacer ejercicio, o sea seguir haciéndolo. Que los pequeños contratiempos sean eso, pequeños contratiempos. Apreciar las cosas sencillas. Sonreir a la gente. Seguir aprendiendo (sin prisas). Dormir ocho horas diarias. Espero no haberme puesto el listón demasiado alto.

domingo, 23 de diciembre de 2007

23 de diciembre

Siempre se me ha hecho extraña la sensación de alegría a fecha fija. También soy consciente de que las navidades es la época más triste del año para mucha gente, para una minoría que puede ser inmensa. No tengo nada en contra de que las familias se reunan, y menos aún de que los niños se ilusionen con los regalos. Leí que estas fiestas en torno a los días más cortos del año vienen sencillamente de la necesidad de los hombres de juntarse y comer y beber para escapar del frío, de la noche, del miedo a lo desconocido. Antes la gente trabajaba duro y necesitaba literalmente el descanso. Ahora yo tengo la impresión de que es fiesta todo el año. Dos consejos de un psiquiatra para las reuniones familiares: Acepta a tus familiares como son y no te dejes llevar por una euforia exagerada (aunque de todas formas no estará mal que hagas un poco el tonto). En último caso soy optimista; a partir de hoy el día, las horas de luz, empieza a alargarse.

sábado, 22 de diciembre de 2007

Mucho y poco

Llegó la hora de los brindis. Como era de esperar le pidieron que dijera unas palabras. Bueno, le dijeron "que hable, que hable". Sonreía y le guiñó un ojo a alguien a mi espalda. Estaba decidido a no hablar. Uno le dijo en voz baja, animándole, "venga, ¿que podrías decir?". Y él contestó, también en voz baja, "mucho y poco". Mucho y poco. Me gustó la respuesta. Me imaginé a qué se refería. A lo mucho que podría hablar sobre los últimos años, sobre los malos tragos, sobre las amistades hechas, sobre los momentos compartidos. Y lo poco que diría si en último caso se veía obligado a hablar. Porque bastaba el gesto, las miradas. Porque es dificil expresar según qué cosas con palabras.

viernes, 21 de diciembre de 2007

Pues sí, ¡feliz Navidad!

Mi rey mago preferido fue Melchor. Baltasar ya estaba elegido. Ibamos a buscar musgo para el nacimiento. El río era un papel azul cubierto por un cristal. Los reyes iban avanzando día a día hacia el portal. Cuando veíamos pasar un avión dejando una larga estela de humo, decíamos que era el avión de los reyes, y que la cola era donde llevaban los regalos. Un chaval proclamó a voces que los reyes no existían y yo lo sentí por mi hermano pequeño que aún no lo sabía. Dejábamos los zapatos para saber qué regalo era para cada uno y una copita de anís para los reyes (nada de agua para los camellos). Una para cada uno, tres. Siempre me preguntaba si no serían muchas en realidad. Un año, uno de los regalos fue un disco que contaba un cuento de Navidad; un cuento muy triste que nos daba miedo. Yo pedía indios, vaqueros, romanos. Luego los guardaba en una caja de galletas en la cocina, junto al fregadero.

jueves, 20 de diciembre de 2007

Mientras me cortan el pelo

Las tijeras bailan a centímetros de mis ojos, chas , chas, y casi como un reflejo instintivo de protección los cierro. Me siento flotar. Soy un submarino que navega por la superficie. Digo submarino adelantándome en el tiempo, porque al cabo de un rato me sumerjo y ahora floto entre dos aguas, y entonces sí soy un submarino. Todo tiene una claridad verdosa. Y me pregunto, ¿cómo es que estoy debajo del agua y sigo respirando?. Abro los ojos. La peluquera me coge el pelo entre los dedos y lo va recortando poco a poco. Cierro los ojos. Respiro acompasadamente. Me dormiría.

miércoles, 19 de diciembre de 2007

Fragmentos escogidos

Todos los días son propicios para aprender algo. Sabía que Oliver Sacks era médico y que había escrito un libro titulado "El hombre que confundió a su mujer con un sombrero", algo que intuía relacionado con el surrealismo (el encuentro fortuito de un paraguas con una máquina de coser sobre una mesa de disección, según Breton). Ahora me entero que es neurólogo y que ese libro trata de un hombre que padece agnosia visual (que es no reconocer lo que se ve), y de otros cinco casos clínicos. Oliver Sacks también ha hablado de otra cosa que yo intuía con algo más de acierto: "Cada persona con una identidad coherente está narrándose a sí misma la historia de su vida todo el tiempo". Eso es; una voz en off que me va diciendo todo lo que siento, lo que me espera hoy, a que hora comeré, los nervios de ayer, la llamada telefónica, que está nublado, mi hermana que viene en avión, voy a escribir esto en el blog, estiro los músculos del cuello, y así noche y día porque el cerebro no para (solo cambia consciencia por subconsciencia o inconsciencia). A veces, para empezar el día, ralentizo la velocidad y hago que la voz sea cálida y persuasiva (en mi imaginación) y sea en efecto la voz en off de mi película. Entonces puedo escuchar esa voz sobre un plano general y aéreo de la ciudad. Según hablo (con esa nueva voz que encandila) la cámara se va acercando y cerrando sobre un barrio, y luego sobre una casa, hasta que entra por mi ventana y me encuadra tecleando un fragmento escogido en mi ordenador.

martes, 18 de diciembre de 2007

If I give my heart to you...

El corazón es un cazador solitario. Carson McCullers. El corazón es una presa solitaria. Si te encuentras con uno, trátalo con cuidado. Que no se rompan los sentimientos que guarda. Que pueda recogerse a la noche y seguir soñando. El corazón late cien mil veces al día y nos marca el ritmo de la vida. Si tienes un corazón a tu lado, siéntelo en las yemas de tus dedos. Es frágil, es sensible al cariño y al desprecio. Haz que tu mirada, tu sonrisa, tus palabras le acaricien. El corazón es como un niño valiente. Atrevido y vulnerable a la vez. Saldrá en busca de aventuras y se asustará. Cuidemos los corazones. ...will you handle it with care?.

lunes, 17 de diciembre de 2007

Monos

Dice el paleoantropólogo Arsuaga que seguimos siendo monos. Sí, somos un tipo de mono. Por eso se entiende que haya una empresa que ofrece encontrar pareja basándose en el olor (a través del ADN). A veces me sorprenden los hechos más elementales de la vida. De la nuestra y la de los demás monos. Por ejemplo que nuestras actividades básicas son comer y dormir. Debería haber una asignatura fija en todos los cursos de nuestro aprendizaje que insistiera en esos conceptos que parece que se dan por archisabidos y que nos definen por encima de todo. Que somos monos, que comemos y dormimos, que vivimos en grandes colonias, que nacemos, crecemos, nos reproducimos y morimos. Es que se nos olvida.

domingo, 16 de diciembre de 2007

Radio Nostalgia

A veces la sintonizo, pero algo me dice que no debo abusar de la nostalgia. Hermana de la melancolía, prima carnal de la tristeza, y mentirosa compulsiva. Cualquier tiempo pasado fue anterior y los recuerdos son sospechosamente selectivos. Cogí en la biblioteca un libro de Paul Auster: "Experimentos con la verdad". El título puede sonar cien por cien Auster... pero no es suyo. Se lo ha puesto el avispado editor a una recopilación de textos de Auster (prólogos, artículos, entrevistas). Dudo que el propio Auster hubiese citado a la verdad para nada. La verdad, o es muy huidiza o no existe. Y este principio se aplica corregido y aumentado a los recuerdos. No me fio de mis recuerdos.

viernes, 14 de diciembre de 2007

Sutiles diferencias

Como cada día Javier tantea en la mesilla para encontrar el despertador que avisa con pitidos cada vez más seguidos que son las siete y veintiocho minutos de la mañana. Acerca la esfera luminosa a los ojos para atinar con el botón "detener" e incorporándose de un golpe pasa a la posición de sentado en el borde de la cama. La oscuridad reina aún en la habitación.
Ahora bien, ¿por qué lado de la cama se ha levantado Javier?. Si nos tumbamos boca arriba en la cama, Javier se ha levantado por el lado izquierdo. El lado de la ventana, que está orientada hacia el norte. Pero no lo había dicho, por lo que cualquier lector podría muy bien haber imaginado que Javier se ha levantado por el lado derecho. No creo, desde luego, que tenga la menor importancia con que pie se haya levantado Javier. Incluso teniendo en cuenta que Javier soy yo. Sólo digo que mi realidad ha empezado a izquierdas y la del lector se ha ido simétricamente a la derecha, en un universo simétrico en el que Javier es zurdo. No importa; un poco más tarde cuando Javier se tome el vaso de leche en la cocina, echará un vistazo al reloj de pared (adelantado unos cinco minutos) y entonces el lector puede muy bien suponer que el reloj está a su izquierda, cuando en realidad está a su derecha. De este modo el lector hará ingresar a Javier en otro universo simétrico que coincidirá, excepto sutiles diferencias, con el imaginado (más que vivido) por el propio Javier. O sea por mí.

jueves, 13 de diciembre de 2007

Vivir para olvidar

Suelen decir que al levantarse de la mesa después de comer hay que tener todavía un poco de hambre. Me doy cuenta de que cualquiera de mis días se compone de dosis más o menos medidas de diversas cosas y si consigo repartir equitativamente mi tiempo me encuentro mejor (soy simple). Lo que quiero decir, y me parece que no me estoy centrando, es que todo tiene su medida y también la memoria. El exceso de memoria es una maldición. Jean Follain (poeta francés que hasta tropezar con esta cita suya no conocía de nada) escribió: "En los campos / de su eterna infancia / vaga el poeta / deseando no olvidar nada". Nada olvidaba Funes "el memorioso" del cuento de Borges y era infeliz. Lo mejor es tener una buena mala memoria y así poder mantener el asombro con cada amanecer.

miércoles, 12 de diciembre de 2007

But seriously

Todo lo que decimos, lo decimos en serio. Cuando hablamos en broma también. Muchas veces aprovechamos un tono más ligero, decimos cosas riéndonos, porque no nos atrevemos o preferimos no decirlas de otra forma. Ahí entra también la ironía. Pensándolo bien no hay tema que no se pueda abordar con una sonrisa.

lunes, 10 de diciembre de 2007

Nieve, arena

He leído que Shakespeare cita doscientas cuarenta flores distintas en sus obras, mientras el francés Racine sólo utiliza la palabra "flor". Bravo por el bardo. ¿Cuántas palabras distintas tienen los esquimales para decir "nieve"?. 49 es una cifra tan buena como cualquier otra. 48 si descontamos la palabra "agua" que utilizan para designar a la nieve derretida. En todo caso es una bonita creencia, sobre todo porque hablamos de algo tan poético como la nieve. Sería de suponer que en el Sahara los tuaregs tienen al menos 24 palabras distintas para decir "arena". Inuit es el nombre con el que los esquimales se refieren a sí mismos. Significa "la gente", término muy apropiado. ¿Cuántos pueblos de la tierra se refieren a sí mismos como "los hombres"?. Casi todos, menos aquellos que prefieren llamarse "los superhombres". ¿Cuántas palabras distintas tendrán los inuit para decir "hielo"?. Los esquimales del norte opinan de los del sur que son unos perezosos que se pasan las tardes al sol sin hacer nada.

domingo, 9 de diciembre de 2007

Protocolos

SMS son las iniciales de Short Message Service. Una vez estaba estudiando arquitectura de redes, esto es la comunicación entre ordenadores y los siete niveles del modelo OSI, del nivel físico al nivel de aplicación. A más de uno le sonará, a mí se me ha olvidado casi por completo. El caso es que salían multitud de iniciales en inglés, nombres de protocolos, de comités, de todo. Comencé a hacer una lista de estos términos, como el mismo OSI (Open System Interconnection) o por poner alguno famoso HTTP, DNS... Al de un tiempo tenía varios folios, y dedicaba parte de mi tiempo a leer revistas técnicas en busca de más. Pensaba (tenía esa fantasía) que cuando los tuviera todos (es un decir) podría publicar un librito, para el que ya tenía título, con la lista ordenada alfabéticamente de los términos con su significado en inglés y una traducción al castellano junto a una breve explicación de su por qué. Ya tenía título, pero se me ha olvidado. Empezaba por "glosario". Además pensaba incluir un chiste. Había un protocolo de nombre LAPD (Link Access Procedure D-Channel) y pensaba hacer una doble entrada con él. Una primera entrada con el chiste y la segunda ya la auténtica. Se ve en muchas películas, LAPD son las iniciales de "Los Angeles Police Department". La carpeta con aquellos folios se perdió en algún traslado.

sábado, 8 de diciembre de 2007

SMS

Encendí el móvil al salir a la calle por la mañana y me entró un mensaje. Lo abrí y decía: "¿A ti te importa?. Salgo a las cinco". Estuve confuso durante algunos segundos. ¿Me importa qué?, ¿quién sale a las cinco?. No encajaba con nada conocido. Comprobé el número del teléfono, y no era de ninguno de los sospechosos habituales. Alguien se había equivocado de destinatario. Seguí a mis cosas. Después de comer me encontré mirando por la ventana y pensando en el mensaje. Decidí que probablemente era un hombre el que lo había enviado (por el tono abrupto) y que la persona que no lo había recibido era una mujer. ¿No debería llamar al número del remitente y explicar la confusión?. Escribo destinatario y remitente como si fuera una carta, no se me ocurre otra cosa. ¿O sería mejor para todos, especialmente para ella (que ya era una mujer bella y misteriosa en mi imaginación) no llamar y que él se fuera efectivamente a las cinco?. Antes era más sencillo, sonaba el teléfono y tú descolgabas y decías: "¿Sí?". Y la otra voz: "¿Está María?". Y tú: "¿Qué María?", aunque no había ninguna María en todo el edificio. Y al final se disculpaba y ya estaba. A las cinco y un minuto me llegó otro mensaje. Era del mismo número desconocido. Lo abrí con un ligero temblor. Decía escuetamente "adiós". Tecleé torpemente, opciones, usar número, llamar (esta sucesión la conseguí sólo al cuarto intento). Tras un tono de llamada salió la voz esa que dice "el número al que llama está etc. etc."

viernes, 7 de diciembre de 2007

¿Bailamos?

"The Hammer Song" la compusieron Pete Seeger y Lee Hays en 1949. Era una canción militante que hablaba de construir un mundo más justo. Trece años después, en 1962, fue un gran éxito en la versión de Peter Paul & Mary (con el título "If I Had A Hammer"). En 1963 Trini López la aceleró un tanto y le añadíó algunos gorgoritos. En 1964 Rita Pavone grabó esta versión en italiano. La letra, de Sergio Bardotti, no tiene nada que ver con la original. Adjunto el texto con todas las onomatopeyas. Destaco dos momentos: Cuando habla de "quella smorfiosa" (aquella melindrosa) y cuando suspira "uffa". En You Tube hay una grabación de la época (recomendada) de la Rai Due.

DATEMI UN MARTELLO
(Bardotti / Hays e Seeger)

A-a-aah
A-a-aah
Du du du da
Du du du da
Du du du
Datemi un martello
Che cosa ne vuoi fare?
Lo voglio dare in testa
a chi non mi va, si si si
A quella smorfiosa
con gli occhi dipinti
che tutti quanti fan ballare
lasciandomi a guardare
eh eh che rabbia mi fa
um um che rabbia mi fa

Du du du da
Du du du
Eh eh datemi un martello
Che cosa ne vuoi fare?
Lo voglio dare in testa
a chi non mi va
A tutte le coppie
che stanno appiccicate
che vogliono le luci spente
e le canzoni lente
Che noia mi da, uffa
che noia mi da

Du du du da
Du du du
Eh datemi un martello
Che cosa ne vuoi fare?
Per rompere il telefono
l'adopererò
Perchè tra pochi minuti
mi chiamerà la mamma
il babbo ormai sta per tornare
a casa devo andare, uffa
che voglia ne ho, no, no, no
che voglia ne ho

Du du du da
Du du du
U-un colpo sulla testa
a chi non è dei nostri
così la nostra festa
più bella sarà, eh eh eh
saremo noi soli
saremo tutti amici
fa-aremo insieme i nostri balli
il surf e l'hully-gully, ah ah
che forza sarà, eh eh
che forza sarà, du du du du du
che forza sarà, o no,no,no,no,no
che forza sarà, ci can ci can
ci can ci can
ci can ci can
ahiiiiii!

Datemi Un Martello - Rita Pavone

Danger

Por alguna extraña razón (for some strange reason) el idioma de fondo de este blog ha cambiado al inglés. He intentado volver al castellano y no lo he conseguido (piove, porco governo). Sí he llegado al pie de página donde dice: "Delete this blog". Supongo que si pinchas ahí te pedirá luego una confirmación, pero no he hecho la prueba. Me ha parecido demasiado peligroso. Too dangerous.

miércoles, 5 de diciembre de 2007

Tú también

¡Cómo quisiéramos ser diferentes!. La que se rebela contra las convenciones sociales. El que no hace lo que todos. La que se atreve a ser naturalmente única. El que escribe como nadie lo ha hecho antes (yo lo intento, pero no me sale). Los que formamos parte del club de los elegidos. ¡Cómo nos gusta que alguien nos diga: "Eres único"!. ¿Será que necesitamos a los demás desesperadamente?. ¿No me debería bastar con ser yo?. Con mis habilidades y mis torpezas, ni más ni menos que nadie. Asumiendo que soy mi mejor juez; el juez que si vienen mal dadas sabrá ser benévolo, generoso. Y si alguien me dice: "Eres único"; le contestaré: "Gracias, tú también".

martes, 4 de diciembre de 2007

Castillos en el aire

Día gris de diciembre y ayer encendieron las luces de Navidad. Hace ya meses que anuncian juguetes en las horas infantiles de la televisión y hace muchos años que ya no soy niño. Mi juguete preferido creo que fue la arquitectura de madera. Piezas de madera de colores cuyo único inconveniente era que eran pocas y no me llegaban para hacer los castillos que yo quería. Todavía hoy me gustaría construir un caserón como el de "el orfanato" con piezas de madera. Siempre pensaba que tenía que guardar las cajitas de cartón de medicamentos y alimentos y hacerme así con un arsenal que me permitiría levantar murallas y torres. Pero por temor a que no me dejaran acumularlas (¿síndrome de Diógenes?), nunca lo hice. Lluvia en un día gris de diciembre y sigo levantando castillos en mi cabeza.

lunes, 3 de diciembre de 2007

Cada día

Le preguntaron a un inglés (a un inglés famoso, pero no recuerdo el nombre) qué opinaba de los franceses y éste contestó: "No lo sé, no les conozco a todos". A mi me pasa lo mismo y no sólo con los franceses. Por eso leo el periódico, para conocer. Cada día le doy un vistazo a esa radiografía de la sociedad. Cada día encuentro algún hecho poco conocido, algún detalle conmovedor. También hago el sudoku.

La verdad del caso de los patitos amarillos

El 10 de enero de 1992 un buque perdió en mitad del Pacífico 28.800 patos, castores, tortugas y ranas de plástico. En 2006 el anuncio de un coche incorpora a los patitos amarillos como extras con el lema "una historia extraordinaria". La imagen de miles de patitos flotando a la deriva por el océano es desde luego entrañable. Uno desearía avistarlos un día e incluso desearles suerte. La verdad es mucho más prosaica. Entre agosto y septiembre del mismo año 1992, cientos de aquellos juguetes llegaron a las playas en torno a Sitka, Alaska. Con intervalos de tres años han seguido llegando a la zona, al parecer en sucesivos giros de las corrientes del Pacífico norte. Con los años los patitos amarillos eran casi blancos (igual que los castores rojos; tortugas azules y ranas verdes conservaban su color). La gran mayoría de los juguetes han desaparecido, seguramente convertidos en polvo de plástico. Aún así algunos escaparon del Pacífico y han llegado al Atlántico a través del Ártico. En 2003 un pato llegó en julio a Maine y en agosto una rana a Escocia. Creo que debemos admitir que los patos de plástico no destacan por su sentido gregario.

sábado, 1 de diciembre de 2007

Comienzo de un relato norteamericano

Acabábamos de mudarnos a un pequeño pueblo de Wisconsin. Mi padre había muerto. Esto es, mi madre y yo habíamos decidido que estaba muerto. Nos había abandonado (aunque, según mi madre, nosotros le habíamos abandonado a él) y luego había muerto lleno de remordimientos por habernos hecho la vida miserable. La verdad es que él salió hacia el este y nosotros hacia el oeste. Hubiera sido necesaria una minuciosa reconstrucción de los hechos para determinar quién había abandonado a quien. Era verano y aún faltaba un mes para el comienzo de curso...

viernes, 30 de noviembre de 2007

Una contradicción: Los leones no saben leer

"Leer es vivir las vidas que otros soñaron". Casi así lo dijo Miguel de Unamuno (a partir de aquí Don Miguel si volviera a salir, que no es el caso) en unos versos. Leer es ya un poco antiguo. Me refiero a leer novelas gordas. En el tiempo en que estás aislado con el "grueso volumen" ha podido pasar de todo en el mundo exterior. Por ejemplo que ya haya salido a la venta una nueva generación de teléfonos móviles o una nueva consola de Sony. Leer o jugar un videojuego son sólo dos de las muchas posibilidades de "perder" el tiempo, y todas son igualmente legítimas. Puede que cada vez haya menos lectores, sería lógico, pero curiosamente cada vez hay más escritores. Es como en los bares que todo el mundo quiere hablar pero casi nadie escucha. Escribo... y sueño una vida.

jueves, 29 de noviembre de 2007

Por el subconsciente

Hoy he soñado. Y ayer. Ha coincidido que soñaba cuando ha sonado el despertador y por eso lo recuerdo. Ayer, lo escribo por si me lee algún psicoanalista freudiano y me explica el significado, veía el comienzo de una película. Se oía una animada música orquestal y entre dibujos de figurines aparecía el título: "Vidas prácticas". En blanco y negro; parecía una de los años cuarenta, puede que de George Cukor. Pero a continuación, como subtítulo, se leía: "Vida de Winston Churchill". Un biopic, pensé (en los sueños las situaciones son soñadas, pero los pensamientos son auténticos). Y justo sonó el despertador.
El sueño de hoy, lo que recuerdo, ha sido mucho más largo. Resumo. Había una ermita y por una escalerita se bajaba a un sótano que resultaba ser una iglesia grande. En la escalera coincidía con un compañero de trabajo y su mujer. Ésta hacía un comentario inocente de que le superaban las noches de vino. El marido le respondía que eso ella, que él aguantaba bien la bebida. Yo ponía cara de circunstancias. Luego salía fuera y todo cambiaba, veía una pelea entre dos pájaros. Yo apartaba momentáneamente con el pie al más agresivo (y pensaba que la naturaleza tiene sus leyes y tal vez no debería meterme). Seguía la lucha y el agresivo caía en un pequeño pozo lleno de agua y tras breve lucha por asomar el pico, se hundía. Entonces aparecía un perro que se metía en el pozo y trataba de salvar al pájaro (y yo pensaba que aunque era un perro de aspecto de lo más normal, quizás estuviera entrenado en técnicas de salvamento). En esos momentos yo estaba sobre un armazón de tablas, una especie de caseta para las herramientas en una huerta. Y la caseta se desmoronaba bajo mi peso. Hacía un pequeño intento de rearmarla, pero pronto abandonaba, dejaba las tablas más o menos apiladas y me alejaba disimulando, pues temía que me echaran la culpa. Al poco veía a dos policías municipales con sus chalecos fosforescentes. Estaban a su trabajo y ni me miraban. Yo iniciaba un pequeño trote, pues de todas formas tenía que volver a casa a varios kilómetros...

miércoles, 28 de noviembre de 2007

Distraído

¿Cómo funciona la mente?. ¿No es un río de pensamientos casi siempre incoherentes?. Flashes que responden a los estímulos exteriores. Y de vez en cuando, echando mano de recuerdos e impresiones, encadenamos un razonamiento. Tenemos una "idea". Brillante o de bombero, aunque generalmente intrascendente. Todo depende de los chispazos de una bujía que es nuestra inteligencia. De la que no somos autores ni responsables, vino de fábrica. Pensar en serio, intentar entendernos (entenderme a mí mismo) es agotador. Por eso, y porque somos vagos, estamos casi todo el tiempo distraídos.

domingo, 25 de noviembre de 2007

Paso del tiempo 104

No había estado por ese barrio hacía tiempo. Iba mirando los comercios y al llegar a la plaza he recordado que alguna vez jugábamos allí partidas de mus en el mesón "Las Campanas". En el sitio donde creía, vagamente, que estaba aquel mesón seguía habiendo un bar. Ahora se llamaba, y así lo ponía en un colorido letrero, "Café Bar Skyscraper". Los ojos se me fueron del nombre hacia arriba, y en efecto era una mole de veinte pisos. Tambíen estaba allí en aquellos años del mus, aunque no me había fijado especialmente. Era temprano y el bar estaba aún cerrado, así que seguí adelante. En la siguiente bocacalle me dí la vuelta y contemplé de nuevo el edificio. Ya no se distinguía el nombre del bar.

sábado, 24 de noviembre de 2007

Vértigo, valor

Tengo vértigo. Me subo a tres metros de altura y me marea mirar hacia abajo. Peor aún, veo en una película a alguien haciendo equilibrios en el bordillo de la azotea de un edificio y lo paso mal, fatal (aunque sé que la escena está trucada, que nadie pasó ningún apuro). O tal vez no es vértigo, es que soy un cobardica (simpática palabra quita-hierro). ¿Cómo se mide el valor?. Uno piensa que podría ser un héroe, que afearía la conducta al matón. Podría digo, no que fuera a hacerlo necesariamente.

jueves, 22 de noviembre de 2007

Grafo que te quiero grafo

Estamos juntos en esto. Pero no sólo los amigos, todos. Aunque son mis dedos los que teclean y mi caletre el que dicta, es de todos lo que escribo; y mío también lo que escriben los demás. Todos participamos en la ceremonia de la confusión o en la fuente de la sabiduría; que no sé como calificar a la lluvia de textos, a la inundación de letras en la que nadamos-leemos. Si al que no utiliza la escritura se le llama ágrafo, nosotros estamos grafos perdidos.

miércoles, 21 de noviembre de 2007

Curiosidades

Todo está en internet (o casi todo). Ví ayer "Syriana". Creía yo que Syriana sería una mujer... pues no. Es un tipo de paz; pax romana, pax syriana. En un veinte por ciento de la película los diálogos son en farsi o árabe, y no había subtítulos. Así que busqué y encontré el guión. No es el guión definitivo, pero está todo en inglés.
Otra curiosidad. Había oído hace tiempo un chiste en que un filósofo extranjero y uno español se entienden por señas. El extranjero le muestra un dedo al español. Éste le muestra dos. Aquél tres, y el español concluye enarbolando su puño cerrado. Preguntado el filósofo extranjero por el significado del intercambio, explica: "Yo le he expresado que sólo hay un Dios, él me ha respondido que no me olvide del Hijo, Padre e Hijo son dos. Yo lo he reconocido y apuntado que con el Espíritu Santo suman tres. Él, como conclusión, me ha enseñado su puño cerrado como símbolo de todo el Universo". Por su parte la versión del español fue esta otra: "Me ha hecho un feo gesto con un dedo, yo le he enseñado dos llamándole cornudo, él me ha dicho que yo más con tres dedos y ya no me he podido contener y le he enseñado el puño para partirle los dientes".
Y resulta que me he encontrado, por internet, una versión de esta misma historieta en "El libro del buen amor" del Arcipreste de Hita, publicado en 1330...

lunes, 19 de noviembre de 2007

La huella

La huella que puedo dejar en la tierra. Una quimera. Puede que sea como cuando echan el cemento fresco y tras allanarlo cuidadosamente lo señalizan con una cuerda o unas cintas para que nadie lo pise y al día siguiente ya bien seco se comprueba que alguien, quizás por la noche, ha pasado y dejado unas huellas perfectas de dos pies que señalan el camino de un vértice a otro de la superficie recién cementada. Y esas huellas durarán años aunque nadie sabrá quién las dejó. Si por el contrario, esa persona se da cuenta de que el cemento está aún blando y decide no pisarlo y dar un pequeño rodeo, no dejará ninguna huella. Nadie sabrá que pasó por allí.

¿No será mucho un arqueo diario?

Inventarium, contaré una de mis contradicciones. Si bien el pasado no importa puesto que ya no podemos incidir en él y lo hecho, hecho está (o lo sucedido, sucedido está) y sabiendo que aunque la moneda haya caído de cara diez veces seguidas las probabilidades siguen estando al cincuenta por ciento la próxima vez que la tire al aire. A pesar de eso, tengo siempre presente mi vida hasta ahora. Hago el inventario de mis vivencias en un rápido vistazo. Y resulta que tampoco en vivencias soy millonario, ni pobre. Una vida privilegiada (así lo siento) perfectamente anodina. Me pongo un cinco. La vida me sigue pasando y eso es lo que importa, las posibilidades previstas de esta mañana de otoño. Y el posible imprevisto para el que estaré preparado.

domingo, 18 de noviembre de 2007

De la humildad

"Nunca pretendo ser más que los demás", le he oído decir a Pedro Duque (astronauta). Y he pensado que llegar a la conclusión de que ésa es la forma correcta de comportarse se me debería haber ocurrido a mí solo, sin que tuviera que venir alguien a revelármelo. No debería pretender ser más que nadie. Al único al que debo superar es a mí mismo, y ese sí que es un reto complicado. Por otra parte, nadie puede asegurarnos que conseguiremos un objetivo; lo único que podemos hacer es merecerlo. Ésto lo dijo Winston Churchill, cambiando objetivo por éxito. Por supuesto, en general, no suelo merecerme nada.

sábado, 17 de noviembre de 2007

Sólo humanos

Sólo somos humanos. William Maxwell fue editor de la revista "The New Yorker" y como tal trabajó con autores como Nabokov, Salinger, Updike o Cheever (el del nadador, Burt Lancaster atravesando el barrio de piscina en piscina). William Keepers Maxwell Jr también fue autor y en una de sus novelas escribió esta frase: "Para conocer la injusticia del mundo sólo hace falta un poco de experiencia. Para aceptarla sin amargura o envidia se necesita casi la suma de toda la sabiduría humana".

viernes, 16 de noviembre de 2007

Entre paréntesis

Por una cuestión de azar estoy leyendo el último premio planeta. No se puede hablar de casualidad milagrosa puesto que el "último premio planeta" es como se sabe una gran operación con cientos de miles de libros que aparecen como ejército invasor antes miles de posibles lectores. Yo lo he escrito con minúsculas, premio planeta, como un pequeño acto de rebeldía (inútil). Estoy leyendo este libro, "el mundo", de Juan José Millás y me está gustando. Tengo últimamente una preocupación (también pequeña), y es que me da la impresión de que incluyo muchos paréntesis en lo que escribo (y ya llevo tres). Así que me ha venido esto a la cabeza mientras leía a Millás y he pensado que llevaba ya 180 páginas de novela y mucho me temía que no había ni un sólo paréntesis en todas las páginas anteriores. Y me he puesto a hojear y he descubierto con una ligera satisfacción que en casi todas las páginas había algo entre paréntesis, incluso en alguna varias veces. Y no me había dado cuenta. Quizás la explicación es lo que escribe Millás en la novela a propósito de un relato que leyó en el Reader's Digest: "¿Cómo era posible que, habiendo sólo letras, yo viera solamente imágenes?".

miércoles, 14 de noviembre de 2007

Una primavera

No aguanté mucho en la residencia. La habitación era pequeña con vistas a la nada y los vecinos franceses ruidosos. Trabajaba a media jornada en el comedor de una escuela, la idea era pagarme así la estancia y las clases de inglés a las que asistía por la tarde. Así que vi el anuncio "Room For Rent" y en seguida llegué a un acuerdo con el dueño de la casa, que se presentó como Mr Doyle. Él había nacido en aquella casa hacia unos cincuenta años, en la posguerra. Me fui enterando de su historia. Vivía solo, había estado casado y tenía dos hijos ya mayores. Tras el divorcio su ex-mujer se había quedado con la casa común (these things happen, comentó) y él había vuelto a la casa familiar. Me invitaba los sábados por la tarde a ver el partido de fútbol en la televisión. Los domingos sobre las nueve salía provisto de un macuto en el que pude ver que metía unos sandwiches, además de un cuaderno y lo que me parecieron unos binoculares (lo eran). El segundo domingo, soy curioso, le interrogué sobre estas salidas (bird watching?, le dije). Sonrió, "I watch trains", me dijo, "miro trenes". "Trainspotting, so", me hice el listo recordando la película. Me propuso acompañarle y el siguiente domingo salimos los dos bien abrigados (era primavera), yo cargando el macuto y él mostrándome la petaca que había llenado con doble ración de whisky ("sólo con propósitos medicinales", me dijo, con esa forma de hablar algo retórica que tenían antes los ingleses). Llegados al punto de observación elegido se sentó en una silla plegable y yo a unos metros en un tronco caído. Apenas hablamos. Estábamos cerca de una estación importante y no pasaban diez minutos sin que apareciese y desapareciese algún tren. Mr Doyle hacía anotaciones en su cuaderno, y a veces me ofrecía los catalejos señalándome algún detalle que yo invariablemente no entendía. Entre paseos para estirar las piernas, los sandwiches, pequeños sorbos de whisky y la aparición estelar de un largo convoy de mercancías con dos locomotoras se nos pasó la mañana. Regresamos a casa (ya era un poco mi casa), ante mi insistencia me enseñó sus cuadernos, fotos, dibujos, algún recuerdo ferroviario. En junio nos despedimos con un sentido apretón de manos. Tengo desde entonces una imagen que siento que expresa mucho aunque no sepa concretar qué: Un hombre, sólo, observando trenes.

martes, 13 de noviembre de 2007

¿Hay vida en Marte?

Si me preguntan por mi vida interior, diré que la tengo. No sé si es asquerosamente rica o solo pasable. Lo que no sé es si tengo vida exterior o es todo imaginado. Según Edward Fitzgerald, traductor de Omar Khayyam, una de las cosas que decía este poeta se puede resumir en esta frase: Caridad con todos, intimidad con nadie. ¿Hay vida ahí afuera?. No me consta. Recuerdo la máxima: De lo que no veo no me creo nada y de lo que veo sólo me creo la mitad. ¿Existe Nueva York o es un hábil montaje del departamento de diseño y artes gráficas de nuestro particular show de Truman?.

lunes, 12 de noviembre de 2007

Sol de otoño

Frío sol de invierno... Una película que no he visto tiene ese título, y es que pensamos, pienso, en clichés; en frases hechas que se adaptan a las situaciones. Pero aún estamos en otoño, luego frío sol de otoño. ¿Qué es lo que quiere la gente?, lo que el mundo necesita es amor. Todo el mundo dice "I love you", pero lo que quiere decir es "love me tender". Nuestro, mi, consuelo es que nos, me, quieran. Gracias por quererme. Al mediodía incluso el frío sol de otoño comienza a calentar. Tibio sol de otoño. Dulce melancolía.

viernes, 9 de noviembre de 2007

Hierro 3

Formo parte de una minoría. Bueno, de muchas minorías; entre ellas de la minoría que ve con agrado las películas de Kim Ki Duk. No presumo de ello, aunque me haga sentir bien. Y aclaro que todos formamos parte de minorías. Incluso los aficionados al fútbol forman parte de una minoría (también formo parte de esa abundante minoría). Me he dado cuenta viendo blogs que todos vemos (nos gustan) las mismas películas. Los que escriben blogs constituyen otra minoría, que coincide casi exactamente con la de los que leen blogs. He visto esta película, Hierro 3, de Kim Ki Duk. No sé por qué se titula así para occidente cuando el título original coreano parece ser que es "Casas Ajenas", que sí tiene sentido. Las películas de Kim Ki Duk son de rara poesía y de poco diálogo (en la otra que he visto "Primavera, verano, otoño, invierno y primavera" hablan poquísimo también) y en ésta de hecho el protagonista no dice absolutamente nada. Es un "chico de la moto", héroe solitario especialmente pulcro. Me ha llamado la atención la presentación de las comidas, exquisitez oriental con platillos y cuencos con los alimentos fríos y calientes de distintos colores. También ver como usa la chica los palillos para comer .Y ver las casas en las que entran (las casas ajenas). Diría que como apenas hablan las imágenes te sugieren más cosas.
Al principio de la película el chico arregla un peso de baño y se pesa dando 65 kilos. Luego se pesa la chica y la aguja queda en 47 kilos. Luego al final, después de que la chica lo vuelve a desarmar y lo manipula, se pesan los dos y marca 0 kilos.

miércoles, 7 de noviembre de 2007

Tiempos resabiados

En el camino de la inocencia a la depravación (es un decir) en el cine van ochenta años. Contradicciones, todas. En tiempos de la depresión americana o en los cuarenta en España tras una guerra inmisericorde si algo no debería haber habido eran sonrisas beatíficas, muchachas inocentes y jovenes galanes ilusionados. O quizás debía haberlos y los había. En el cine en blanco y negro para expresar sorpresa se veía un rostro en primer plano, con la boca abierta, las cejas levantadas, la expresión de absoluto asombro durante interminables segundos. Hoy todo queda resuelto con un breve gesto de los ojos. Ha sido necesaria una larga educación en el lenguaje visual, un engordar paulatino de las elipsis cinematográficas, largas horas en la oscuridad de la sala aprendiendo a comportarnos como perfectos occidentales, captando las emociones como perros de Paulov, estímulo, reacción, para llegar al actual "estado del arte". Lo mismo ha pasado con la ironía, no ya en el cine sino en la vida (cotidiana). Hubo un tiempo en que una ironía no era entendida, o peor, era entendida literalmente. Poco a poco se hizo un prestigio, era una característica apreciada, un salpimentar el discurso. Pero a fuerza de ser irónicos hemos llegado al actual desbordamiento de la ironía. El discurso (el monólogo) es muchas veces exclusivamente irónico. Estamos ahogados en ironía. Que alguien diga algo inocente, puro, auténtico, por favor.

martes, 6 de noviembre de 2007

Irlanda en una postal

Estoy recorriendo la rocky road to Dublin, a través del verde esmeralda del paisaje. Por las orillas del Liffey. Paladeando la sonoridad de los nombres irlandeses, Shannon por ejemplo, Tipperary por ejemplo, el condado de Donegal, la playa de Malahide, la ciudad de Killarney, los acantilados de Doneen. Cae la tarde, los buenos hijos de San Patricio rezan sus oraciones y la sed de siglos lleva a los hombres a buscar una pinta de cerveza. La lluvia y el viento de una noche de perros ahí afuera a un paso de los bosques poblados de hadas y duendes; y dentro las voces roncas que marcan el ritmo de una giga, la promesa de un caldero lleno de monedas de oro al final del arco iris. En la verde Erin de los tenaces gaélicos (God save Ireland, said the heroes) y las princesas pelirrojas de nombre Maureen.

lunes, 5 de noviembre de 2007

Moong Joong Yun

En "Chunking Express" se escucha esta versión de Faye Wong del "Dreams" de The Cranberries. ¡En chino cantonés!. El efecto de la suma de las imágenes y la música son el mejor ejemplo de sinergia que se me ocurre. Se puede imaginar uno el significado que quiera a la letra. Ésta es la transcripción fonética al inglés.

Moong joong yun yut fun joong po gun
Jeep sup fun (joong) dik mun
Muk sung yun jum mor jau jeun noi sum
Jai jo je tsee hing fun
Ngor fong tsee gun nei yeet luen gwor
Wo nei mei tsee yeen joi je yeung kun
See seung hoi tsee gwor fun
Wai hor duk yeen jaap gik ngor
Loi jeun yup ngor moon tau moong wor
Gik hei yut boon jun hum
La...
Moong jo ong yun dor mor seung been jun
Ngor joi sum lui but gum
Moong joong tsum je fun joong ngor joi dung
Nei maan fun joong dik mun
[repeat *]
Moong joong tsum yut fun joong po gun
Ngor joi sum lui but gum
Moong joong yun je fun joong ngor joi dung
Loi jai jo sum lui hing fun sum hing fun
La...

Dream Person - Faye Wong

domingo, 4 de noviembre de 2007

La última vez que vi París

He visto "París, je t'aime", una película de episodios que transcurren en París, la France. Supongo que ha sido subvencionada por la municipalidad, por el "hotel de la villa" (tuve que ver varios "hoteles de la villa" antes de enterarme de que así se decía en francés "ayuntamiento"; como tuve que ver varios "ausgang" en la autopista para saber que no era el nombre de una localidad sino "salida" en alemán). La ventaja de una película de episodios es que no te da tiempo de aburrirte; para cuando empiezas a hacerlo se pasa a la siguiente historia. Me he acordado de la vez que estuve en París. Es la ciudad más visitada del mundo y yo también he estado allí, una sola vez. Aunque ya había estado antes. En un sueño. Un sueño confuso de calles, luces y sirenas de bomberos y policía. Lo único que estaba claro es que era París. Luego subí a la torre Eiffel (la vez que estuve despierto, tengo testigos), estábamos tres amigos y uno no quiso subir. ¿Por qué?, le preguntamos, y que ¿para qué?, que no le apetecía. Subimos el otro y yo para comprobar que desde lo alto solo se veía un manto de nubes que escondía la ciudad (esta vez sin luz). Por lo demás hice en París lo que suelo hacer en otras ciudades: Andar, andar y andar. En la calle del árbol seco (algo así como la rue del arbre sec, y discúlpeme mademoiselle por la ortografía) había una tienda de discos llamada "American Records" y allí hice otra cosa que suelo hacer en otras ciudades: Compré un disco, un grandes éxitos de The Cascades. La película está bien.

Refranes

Sin prisa pero sin pausa, dice la sabiduría popular. Las prisas son malas consejeras o vísteme despacio que tengo prisa; son otros dichos alusivos. No es lo mismo remolonear que demorarse (esto no es un refrán, solo una observación mía). La cultura del slow down en inglés. No hay mejor modo de realizar una tarea que afrontarla con gusto y sin prisa, a tu ritmo; puede que incluso recreándose un poco en la suerte. También se aplica a la vida en general; otro refrán: No por mucho madrugar amanece más temprano. Sentimientos a evitar rigurosamente: La ansiedad, la culpabilidad, la irritación, la obsesión por no "perder el tiempo". Por mi parte soy un impaciente crónico, pero prometo (intentar) corregirme.

sábado, 3 de noviembre de 2007

Llegó el aguafiestas.

La nostalgia es otro nombre de la melancolía. Una prima, y una prima mentirosa. Es común sentir nostalgia de los días de la infancia y de la juventud, pero todo apunta a que aquellas infancias y aquellas juventudes solo tenían de buenas las posibilidades que aún encerraban y que luego se fueron quedando en el camino. Así que siento nostalgia por todo lo que pudo ser y finalmente no fue. Como en el anuncio (malditos anuncios que copan la creatividad de toda una generación y que me pisan las entradas; ¿no estaré viendo mucha televisión?) el viaje que no hice, la novia que no tuve, las risas que no reí, los goles que no metí, los amigos que no conocí, el beso que no dí y el beso que no recibí; y que, ¿quién sabe?, quizás fuera el mismo beso.

jueves, 1 de noviembre de 2007

Vinilo

Vinilo es una palabra en desuso. Según la RAE significa en primera acepción "Grupo funcional monovalente no saturado" (no entiendo nada), y en segunda "sustancia, generalmente un polímero, que lo contiene". Yo hubiera dicho que es un tipo de plástico que se utilizaba para hacer discos. Poner un disco de vinilo en un plato y reproducirlo colocando la aguja sobre los surcos viene a ser como recordar un sabor de la infancia. El ruido inherente resulta entrañable. La tienda de discos de la novela (y película) "Alta fidelidad" se llama "Championship Vinyl". Y si has pronunciado mentalmente "vinil", you are... wrong. En la película John Cusak lo pronuncia varias veces "vainil". En un plano se ve el letrero al que se le ha caído una letra y se lee "Champions ip". ¿Puede ser un guiño al mundo digital que ha dejado al vinilo como una reliquia del pasado?.

miércoles, 31 de octubre de 2007

Little Pigs

"Cinco cerditos" (Five Little Pigs) es una novela de Agatha Christie que toma su título de una canción infantil, como antes lo había hecho en la más popular "Diez negritos". Tres cerditos eran los del cuento, aquellos que tuvieron sus diferencias con el lobo feroz. Haciendo un cálculo rápido, deduzco que los tres cerditos deben ser ya unos señores cerdos. Quizás sigan viviendo en la casa de piedra, parecía sólida. Ahora hay un anuncio en la tele de un ambientador donde aparecen otros tres cerditos, a los que se les ve entrar en tropel al cuarto de baño. Lo curioso del caso es que, en el anuncio, la madre de los tres sonrosados y alegres cerditos es una mona... Asumo que la susodicha mona pueda ser una ama de casa que nos habla de lo conveniente que es ese ambientador para su hogar, sobre todo teniendo en cuenta a los pequeños de la familia; pero que los hijos sean cerditos... Walt Disney no lo hubiera aprobado.

lunes, 29 de octubre de 2007

Desventuras de un lector

A veces me pasa que cuando leo un diálogo en una novela y se supone que a cada personaje le corresponde un párrafo (me refiero a cuando hay dos personajes, más ya serían multitud), me pasa, decía, que llega un momento en que ya no sé qué personaje está hablando. Entonces releo el último párrafo e intento deducir por lo que dice quien está hablando. Pero suele pasar que ambos pueden haberlo dicho, y tengo que volver al principio de la conversación e ir contando; ella, él, ella, él, ella , él, hasta llegar al párrafo en disputa. Y quizás encontrarme con que el que habla de estrenar el vestido es aparentemente él, y un mar de dudas me ofusca la mente: ¿Puede que él se vista de mujer?, ¿me he equivocado al contar los párrafos?, ¿uno de los dos ha callado y el otro ha repetido turno?, ¿se han comido alguna parte al imprimir el libro?, ¿la primera frase que parecía que la decía ella, en realidad la dijo él?, ¿lo estaba entendiendo todo al revés y ni siquiera me daba cuenta?.

domingo, 28 de octubre de 2007

Tic tac

Lo primero que he hecho al levantarme ha sido cambiar la hora en el radio-despertador. Luego el reloj de pulsera y el móvil. A media mañana me acuerdo del móvil de la empresa y pongo la hora correcta, no vaya a ser. Al mediodía descuelgo el reloj de la cocina y hago girar las manecillas sintiendo la satisfacción de un artesano suizo. A la tarde he comprobado que el ordenador se ha puesto solito en hora. Me queda el reloj del coche, que ajustaré mañana, ya que hoy no lo he usado. ¿Se me olvida algo?. Miro nervioso el reloj. Con una hora apenas tengo tiempo de cambiar la hora.

Trece

En el año 2046 puede que encuentre a cinco personas en el cielo, ahora prosigue mi vida sin mí. Es de noche en la tierra y mientras recojo las flores rotas antes de amanecer, medito las cosas que nunca te dije pero que diría con sólo mirarte. Agua en los zapatos a orillas del río Mystic, pasan las horas y sigo atrapado en el tiempo. Solo tengo lo que queda del día.

viernes, 26 de octubre de 2007

Que se llama Soledad

La soledad era esto, escribió Juan José Millás, y yo leí la novela y no me enteré qué es lo que era exactamente la soledad (y no fue culpa de Millás). Ser y estar: Puedo ser sordo y puedo estar solo. En algunos casos se es solo. Soledad y sociedad. Cada uno tenemos nuestro equilibrio. Se puede estar solo y desear compañía (y es una pandemia del siglo XXI) y se puede estar en compañía y desear estar solo. A mi me pasan ambas cosas. Podemos tener delante una larga condena o unas largas vacaciones de soledad. Si tengo que elegir, optaré por lo que más me convenga.

jueves, 25 de octubre de 2007

Balbuceo

Para los que llegaron tarde: Nada hay original en este blog. Puede ser ingenuo, sincero, tedioso y mil cosas más; pero no puede ser original. Todas las palabras que se usan aquí son prestadas. Todas las ideas son repensadas, algunas revenidas. Si hubiera un atisbo de algo sutilmente innovador, reconozco que ha sido sin querer. Sin embargo y milagrosamente, esta combinación de incoherencias gramaticalmente ordenadas es única. Nadie la había escrito antes y nadie la escribirá después (salvo copia). Así es la vida, una combinación única de incoherencias por lo demás sobradamente conocidas.

miércoles, 24 de octubre de 2007

Poeta en el ascensor

Hablar del tiempo. El tópico de los ascensores, y confieso que lo practico; ha enfriado, a ver si sale el sol el domingo, ya hacía falta un poco de lluvia. Pero es que son palabras de carbono cristalizado, preciosas. Por más que las manoseamos, no es que no pierdan su valor sino que parece que las lustramos y brillan más. Favoritas de todos los tiempos de los poetas. Estrella, cielo, lluvia, nieve, brisa, nube, luna, sol, aire, ola, relámpago, estío, otoño, rocío, niebla, bruma, aguacero; apuesto que hay más de cien, quizás mil, palabras que son colores y matices para los poetas y para los usuarios de los ascensores.

martes, 23 de octubre de 2007

Duermo, luego abdico

The Big Sleep, la gran dormida. O el sueño eterno, en poético. Esta novela y película del género negro tenía una trama tan complicada que al autor, Raymond Chandler, se le pasó explicar uno de los asesinatos. Yo recuerdo la escena en la que Humphrey Bogart charla con la dependienta de la librería, Dorothy Malone, y hay un pequeño coqueteo y Dorothy (una preciosidad de veinte años entonces) se quita las gafas y se suelta el pelo. Suspiro. Pero lo que quería comentar era lo del sueño. El sueño de dormir. Este cuerpo que arrastramos o que nos lleva a nosotros o que somos nosotros, necesita dormir. Atender a las necesidades del cuerpo nos proporciona placer, y dormir es también un placer. Es olvidarnos de todo, renunciar a la consciencia, abdicar en el heredero (quien quiera que sea), poner el piloto automático y solo respirar. Dejar vagar la mente. Buscar la postura y el calor exactos y hundirse en el sueño, músculos relajados, párpados cerrados, vida suspendida. No quiero acordarme ahora de la fase REM, Rapid Eye Movement... ¿De verdad los ojos se mueven?. Suena horrible.

lunes, 22 de octubre de 2007

Generosidad

El mundo se divide en dos clases de personas (¿de qué me suena esta frase?). Las que dan y las que no dan. Recibir no es relevante en esta clasificación. Las que dan son más felices (o menos infelices, diría un optimista bien informado). No hablamos de dinero, claro. Si nos situamos en el bando de las personas que dan (y ójala me dejaran quedarme) veremos que hay un subgrupo, una élite. Son las personas que dando más que nadie se empeñan en quitarse mérito diciendo que son en realidad egoistas, porque al dar siembran y saben que serán compensadas con creces. No lo creo, porque son personas únicas y además se conforman con poca cosa. Dedico esta entrada a la persona que me lo hizo ver: Cristina, un beso.

viernes, 19 de octubre de 2007

Memorias

Un libro que se me aparece recurrentemente, citado siempre como ejemplo y como obra maestra es el titulado "Memorias de ultratumba" de Chateaubriand. La primera idea del autor era llamarlo "Memorias de mi vida"... ni color. Cualquier autor, a poco que se descuida, acaba escribiendo para la posteridad (tras un breve periodo de escribir para sus contemporáneos). El libro (o debería decir la obra, pues está dividido en 42 libros), no figura en los estantes de la biblioteca que frecuento; pero sí está disponible en francés e inglés en Internet (estar en Internet suena raro, es como estar en espíritu). Empieza a escribir el 4 de octubre de 1811 y la primera cita latina que hace es ésta: "Spatio brevi spem longam reseces" que viene a decir que ya que el tiempo es breve, debemos limitar nuestras expectativas. Son versos de Horacio, lo que viene justo antes del famoso "carpe diem". Este Chateaubriand vivió 79 años y le dió tiempo de hacer muchas cosas.

jueves, 18 de octubre de 2007

¿Sigo siendo de los nuestros?

Los sentimientos son material sensible. Touchy, se dice en inglés de la persona que en seguida se da por aludida, se siente herida. De touch, tocar. Touché, en francés, cuando se reconoce que nos han tocado en un punto débil. No podemos mandar sobre las emociones, como mucho encauzarlas, razonarlas. No soy un fulano con la lágrima fácil, decía Sabina en la canción del pirata cojo. A mí se me aguan los ojos en el cine en algunas ocasiones. Con el tremolar de las banderas, por ejemplo, y lo pienso y me pregunto por qué. Con las señas de identidad hay que ser respetuoso, haberlas haylas. Respeto a todos los que desearían ser enterrados envueltos en una bandera. Pero, éstaba claro que había un pero, ¿por qué una bandera y no otra?. ¿Alguien se cree que por haber nacido en un sitio, por ser de un grupo social, por ser "uno de los nuestros", tiene algún derecho especial, tiene más suerte que nadie, puede con justicia compadecer a los desafortunados que tienen otra bandera?. Ojalá se vayan borrando las fronteras y ser de los nuestros o de los otros quede sólo para las competiciones deportivas.

miércoles, 17 de octubre de 2007

Walter Mitty

El héroe romántico mantiene siempre la expresión serena, amable; la mirada ligeramente soñadora. Aseado pero de aspecto informal, si no se ha afeitado recordará vagamente a algún actor americano. Saldrá de casa sin rumbo fijo pero con una misión que cumplir. Pasa desapercibido, pero es aceptado y respetado implícitamente por todos. Si para en el mercado para comprar fruta parecerá que lo hace de pasada o como tapadera de los asuntos que le ocupan de verdad. Se sentará en un café en una mesa estratégica que le permita observar discretamente la plaza, lo que hará mientras hojea el periódico. En cualquier momento puede llegar su contacto, muy probablemente una bella desconocida.

martes, 16 de octubre de 2007

Ecos húngaros

Había una película "Trenes rigurosamente vigilados" de Jirí Menzel. Antes fue novela de Bohumil Hrabal. El caso es que viendo el despliegue de portadas de revistas en un kiosko, llenas de rostros y cuerpos resplandecientes, satinados, me ha venido a la cabeza esta para-frase (¿me estoy inventando esta palabra compuesta?): "Ingles rigurosamente depiladas".

lunes, 15 de octubre de 2007

Viaje en el tiempo

Hacía tiempo que no me ponía estos pantalones. En el bolsillo de las monedas he encontrado una de cinco pesetas. Un duro, pero de los últimos, del tamaño de los céntimos de ahora. Estoy bastante hecho al euro, y no me gusta cuando alguien se empeña en calcular el costo de algo en pesetas (con la excepción de los millones, para las cifras grandes lo calculo mentalmente). Así que ha sido todo un descubrimiento esa moneda, ya inútil. La meteré en un bote que tengo de monedas antiguas y de varios países. Es el rescoldo del impulso coleccionista que tuve. El impulso que me hacía guardar sellos y cajas de cerillas. Se me pasó. Los pantalones, por cierto, no me los puedo abrochar. He tenido que dejar el botón suelto. Y no me lo explico porque sigo estando igual que hace unos años...

sábado, 13 de octubre de 2007

Imperfecto

"Todo lo que hacemos es la copia imperfecta de aquello que pensábamos hacer". Fernando Pessoa. Esta entrada (de este largo partido de baseball que es este blog) es sólo un eco, una sombra de la expresiva, emotiva, sugerente entrada que tenía yo intención de escribir. En cualquier conversación lo que decimos nunca es exactamente lo que pensamos. Al teclear esto, concreto una de las muchas posibilidades que tenía. Y lo hago de forma imperfecta (que sigue siendo mejor que no hacerlo de ninguna forma).

viernes, 12 de octubre de 2007

Due parole

Las palabras largas no son cómodas (de usar). Estoy pensando en aburrimiento. Ésta además suena horrible, con ese comienzo aburri.. Aborrere en latín (lo he mirado) significa "tener horror". Veo dos tipos de aburrimiento (con perdón), el del que no tiene nada que hacer y el del que haciendo algo lo encuentre poco o nada satisfactorio y por tanto se aburre soberanamente, a la manera de los reyes. En ambos casos se manifiesta una notable carencia de imaginación. Aburrimiento no es una palabra que convenga a los poetas. Tienen otra; mucho más afilada, contundente: Tedio.

jueves, 11 de octubre de 2007

Poco a poco

Leo en una entrevista que José Bono (no el de U2, el socialista) viene escribiendo desde 1990 un diario en su ordenador que ya ocupa 16.000 páginas. Es lo que tiene la constancia; línea a línea edificas un imperio. Supongo que tendrá hecha copia...

miércoles, 10 de octubre de 2007

Oportunidad

Estoy preparado para el apagón analógico. De la televisión, me refiero. Estoy avisado de que el veinte de marzo de 2009 se estrenará en España la adaptación cinematográfica del comic "The Spirit". A eso le llamo yo planificar. Que la inspiración me pille trabajando, o sea proactivo. Se trata de estar en el sitio adecuado en el momento oportuno. Cuando le criticaron a Raymond Chandler que se vendiera a los productores de Hollywood (para escribir guiones), contestó: "Si fuera peor escritor, no me habrían llamado; y si fuera mejor, no hubiera ido yo". Así encajamos muchas veces en nuestro sitio, nuestra densidad nos hace flotar o nos hunde. Sonríamos, que nos van a hacer una foto.

Tendiendo puentes

Preocuparse es, como se sabe, absurdo. Si tiene solución, nos ocupamos en ello y ya está. Si no la tiene, ¿por qué preocuparse?. Como también se dice, no se puede cruzar un río antes de llegar a la orilla. Y cuando lleguemos, busquemos el puente. Una construcción genuinamente humana. Como dijo Julio Cortázar: "Un puente es un hombre cruzando un puente". Si nadie lo cruza un puente deja de ser (o casi). Me viene a la mente la palabra pontífice, "constructor de puentes" en su etimología. Alguien importante.

lunes, 8 de octubre de 2007

Castañas en los bolsillos

¿En qué se parece un huevo a una castaña?. Algo se parecen, no mucho. No se puede llevar un huevo en el bolsillo. O no conviene llevarlo. Yo llevo dos castañas en los bolsillos, una en cada uno, desde hace tres días. Son agradables al tacto, no resultan demasiado incómodas cuando al meter la mano para sacar el móvil, las llaves o el pañuelo tengo que descartar primero una de las castañas, según el bolsillo que sea, que parece tener especial querencia hacia mis dedos. Son de esas castañas que no se comen; quizás sean pilongas, no sé. Me han informado de que llevarlas en los bolsillos es bueno para prevenir el reuma. No veo la relación causa-efecto, no soy supersticioso y no tengo reuma; pero me gustan estética y táctilmente las castañas. Y, de momento, llevo dos en los bolsillos.

sábado, 6 de octubre de 2007

Pequeñas ilusiones

La poca edad, la falta de experiencia o la naturaleza soñadora hacen que nos carguemos de ilusiones al comienzo de la vida. Niño e ilusión, ¿no son sinónimos?. Ilusión, palabra positiva donde las haya. Tener una ilusión es tener una razón para vivir (curiosamente ser un iluso no es en absoluto positivo). Me da la impresión de que tener un sueño es algo mucho más etéreo. Con ilusiones puedo pisar el suelo con decisión. Las pequeñas cosas, lo cotidiano; ahí está el secreto. Hay que mantener esas ilusiones. La ilusión de escribir una entrada en este blog, por ejemplo.

viernes, 5 de octubre de 2007

Cuando fui rey

Todos, o casi todos, hemos sido reyes y reinas. Yo lo fui durante un año y diez meses. Y siento añoranza, nostalgia, saudade de aquel tiempo que no recuerdo en absoluto; cuando fui rey en brazos de mi madre. Luego fui destronado por mi hermano recién nacido. No le guardo rencor.

miércoles, 3 de octubre de 2007

¿Qué es la vida?

No sé. No sé. No sé. Las grandes preguntas o los grandes lagos. Me dejarían en medio del lago Ontario y no sabría qué lago era y me ahogaría igual. ¿De dónde vengo?, ¿quién soy?, ¿a dónde voy?, ¿llevo otra muda por si acaso? (Woody Allen). La vida es... Hay un subgénero literario que trata de explicar la vida en frases redondas (y sin embargo afiladas). "La vida es una mala noche en una mala posada" Santa Teresa de Jesús. La vida es sueño, es como una caja de bombones, es bella, es el breve periodo entre dos relámpagos en una tormenta... la vida es , y siento terminar con esta palabra; la vida es, decía, la vida es la muerte.

martes, 2 de octubre de 2007

Silencio

Silensen, silensen, no quiero ruidos en la vecindad... Estos "silensen" deben ser francés y no sé como se escriben. Ésta es una canción que medio aprendí y que parece que sólo se canta tras varias ingestiones alcohólicas. Contradictoria, porque pide silencio cuando lo está profanando. Igual que beber agua no rompe el ayuno en la doctrina católica, tampoco las palabras leídas rompen el silencio en las tardes de otoño. El silencio absoluto no existe. Precisamente cuando callan los grillos en la noche es cuando se alarma el explorador indio en el campamento. El silencio perfecto es aquel que nos da de vez en cuando una pista de que estamos vivos: El susurro del viento, una risa lejana, un rumor de agua, pequeños sonidos que van punteando el paso del tiempo.

lunes, 1 de octubre de 2007

This feeling of make-believe

Palabras de cuatro letras en inglés, que no son malsonantes y hacen referencia a una ocultación de la realidad. Sé dos: "Hoax" y "Fake". Estafa y fraude. Es el inglés que se aprende si te gusta el cine. "The Hoax" es la última de Richard Gere, "F for Fake" fue la última de Orson Welles (el gran histrión). Ya con más letras: "Pretender", simulador, como en "The Great Pretender", la canción de los Platters que también grabó Queen, o "Imposter", impostor, como en "(He's) The Great Imposter" de los Fleetwoods (no Fleetwood Mac). No como el gran simulador o impostor, sino como un tramposo anónimo, así me siento a veces. Un canalla (Scoundrel) que se hace pasar por bueno. La persona que esperaban que fuese, no la que soy de verdad. Y así mantengo engañados a algunos durante algún tiempo. Ya se me pasará.

sábado, 29 de septiembre de 2007

Dinero

Ya sabíamos que el dinero no da la felicidad, pero está claro que hay un mínimo imprescindible (con la excepción de aquellas personas con olor a santidad que se parecen poco al común de los mortales y a mí). En una universidad han calculado que para ser dichosos los ingresos anuales han de ser de unos 11.500 euros, cubriendo así las necesidades básicas de alimento, cobijo, ropa, amigos y familia (no acabo de entender la relación exacta entre dinero y amigos y familia). No puede ser menos, por razones obvias, pero tampoco más porque entonces entramos en una espiral de adaptación y comparación que nos hace desgraciados. Es cierto, si todos mis vecinos tienen "tres" y yo tengo "cuatro", me siento estupendamente. Sin embargo aunque tenga yo "cuatro", si los de alrededor tienen "cinco", algo me reconcome por dentro. ¿Somos o no somos idiotas?.

viernes, 28 de septiembre de 2007

If you see her, say hello

El gran Bob Dylan grabó esta canción en 1974 (en "Blood On The Tracks"). Como otras canciones del album se refiere a la crisis que pasaba su matrimonio con Sara. También existe una versión con sólo guitarra (en las "Bootleg Series"), pero a mí me gusta más como la grabó Francesco De Gregori que al principio de su carrera hizo muchas versiones de Dylan en italiano. Adjunto la letra para que la cantes con él.


Se la vedi dille ciao, salutala dovunque sia
E partita tempo fa e adesso forse è in Tunisia
Dille che non si preoccupi per le cose lasciate qui
E se crede che l'abbia scordata, non dirle che non è così

Abbiam dovuto dividerci e sbatterci qua e là
Ma per quelli che si amano non è certo una novità
E adesso che se n'è andata, e adesso che non c'è
È ancora nel mio cuore, è ancora vicina a me

Semmai la incontrerai, dalle un bacio da parte mia
Ho sempre avuto rispetto per lei, per come se n'è andata via
Se c'è un altro che le sta accanto, certamente non sarò io
A mettermi fra di loro, ci scommetto che non sarò io

Faccio un lavoro strano, vedo gente in quantità
E mi capita ogni tanto di sentire il suo nome in giro per le città
E non c'ho fatto ancora l'abitudine o forse mai ce la farò
Sarà che sono troppo sensibile o nella testa chissà che c'ho

Sole grande, luna blu, il passato è ancora qua
E so a memoria i ricordi e il tempo prende velocità
Se tornasse da queste parti, il mio indirizzo la gente lo sa
Tu dille che può cercarmi: se trova il tempo, mi troverà.

Non Dirle Che Non E' Cosi' - Francesco Di Gregori

jueves, 27 de septiembre de 2007

Indicio

He encontrado una hoja en el ascensor. Una hoja de árbol. Ha sido como encontrar un cuadro romántico (de Delacroix) en un museo de arte moderno (el Guggenheim). Poniéndonos minimalistas, claro. Una hoja lisa, con su peciolo, sus formas naturales y perfectas y su color verde y amarillo. Una hoja de otoño. Bajo la fría luz fluorescente del ascensor, sobre la goma con puntitos antiadherentes del suelo; una hoja. La he recogido y examinado atentamente. He admirado su silueta cercana a la simetría. Me he preguntado como podía haber llegado al ascensor. No es como las hojas de los árboles de la plaza, ni como las de la enredadera de la puerta del garage comunitario. Al salir a la calle la he tirado.

miércoles, 26 de septiembre de 2007

Breve encuentro

En un mundo sin luz, en una noche sin luna ni estrellas; así vive la chica ciega. Debe de vivir cerca, aunque sólo le he visto tres o cuatro veces en otros tantos años. Ayer le ví. Yo iba paseando por un camino del parque, pensando en las musarañas, cuando sentí que la persona que venía de frente se paraba. Aunque iba con su perro guía, no me había dado cuenta de que era ella, la ciega. El perro, o ella, o ambos, habían notado mi presencia en su camino y esperaban que me retirara. Serena, no llevaba gafas y tenía los ojos abiertos y fijos aparentemente en la lejanía. Tiene el pelo corto, es delgada y siempre que le he visto iba vestida sencilla pero elegantemente. Me aparté, dando un rodeo exagerado por el otro lado del camino. Temía sobresaltarla si pasaba demasiado cerca. Tras un leve titubeo reanudó la marcha. Sentí el impulso de decirle algo. Sobre el tiempo, sobre el perro, de lo guapa que era, que sentía haberme puesto en su camino, que sentía muchísimo que fuese ciega. Pero no dije nada. Continué andando hasta que supuse que ya no se daría cuenta si me paraba y me giré para verle alejarse.

martes, 25 de septiembre de 2007

Historia

Ésta es la historia más triste jamás contada; ésta es la historia más grande jamás contada; o la más larga, o la más cutre. Y entre todas se escribe, figuradamente, la Historia con mayúsculas. La madre de todas las historias. Propongo que en la Universidad la Licenciatura en Historia pase a denominarse Licenciatura en la Historia, si bien me parece pretencioso afirmar que al terminar la carrera alguien vaya a saber poco más que un esbozo de la misma. Porque la Historia es como el mapa de Borges, que ocupaba tanto como el territorio que representaba (escala 1 a 1). Quizás los seres humanos sólo tenemos sentido como peones de la Historia. La humanidad es la Historia de la especie. La Historia es la humanidad, es nuestra historia.

lunes, 24 de septiembre de 2007

Llegado a esta edad

Evelyn me sigue pareciendo nombre de mujer, aunque ya me he convencido de que Evelyn Waugh fue un hombre (ya que sorprendentemente Evelyn vale para todo). Con ese nombre, lo que son los prejuicios, le hacía gay; y aunque tuvo un par de amoríos homosexuales en sus tiempos de estudiante luego su conducta fue heterosexual. Tanto que tuvo siete hijos con su segunda esposa. Antes estuvo casado dos años con Evelyn Gardner y sus amigos se referían a ellos como He-Evelyn y She-Evelyn.
El escritor Evelyn Waugh se puso a escribir su autobiografía cerca de los sesenta años "una vez pasada la edad de dejarse guiar por la ira". Mucho mejor así. También yo aspiro a prescindir de la ira.

jueves, 20 de septiembre de 2007

Los ancianos

Los ancianos, me suena a título de tragedia de Esquilo. Cuando Paul McCartney escribió "When I'm Sixty Four" seguro que se imaginaba con cachava y algo achacoso, o sea viejo. Ahora resulta que ha superado esa edad. Quizás se haya preguntado por qué no escogió titular la canción "When I'm Eighty Four", que también encaja. Podemos ser viejos a los cuarenta, a los ojos de un hijo de quince, o a los ochenta, a los ojos de todo el mundo. "Ser viejo es como ser extranjero" dice Manuel Alcántara. Creo que tiene razón. Cuando alguien llega a una edad lo suficientemente avanzada deja de ser lo que fuera que ha sido, taxista, arquitecto, coleccionista de sellos, y pasa a ser simplemente un viejo. Normalmente a lo más que puede aspirar es a no molestar. Leo una entrevista a dos ancianos actores. Han bordado su último papel, porque han hecho prácticamente de ellos mismos: De viejos. Desde los griegos la vejez es una tragedia, aunque Esquilo no escribiera una obra sobre el tema.

miércoles, 19 de septiembre de 2007

Voy a decir una frase

El tiempo es un caballo desbocado. He despertado montado en él; y me abrazo a su cuello y tengo miedo, porque no sé montar. No hubo ocasión de ensayar. Lamento ahora que cuando me parecía que el caballo solo trotaba no me fijé lo suficiente, no supe aprender. Me hubiera servido para evitar unos pocos errores, no ir tan tenso por ejemplo; aunque sin duda hubiera cometido otros, espolear temerariamente al noble bruto por ejemplo. La vida es el arte de cabalgar a pelo el caballo desbocado que es el tiempo.

lunes, 17 de septiembre de 2007

Opiniones

Dos no discuten si uno no quiere. Pero muchas veces quieren los dos. Queremos los dos. Y tarde o temprano nos damos cuenta de que no merecía la pena. La cuestión deja de ser trascendente, porque sencillamente nunca lo fue. Que dos opiniones sean distintas es lo más probable siempre. Y si lo pensamos un poco descubriremos que esas dos opiniones están en el mismo lado de la barrera; que seguimos estando juntos y siendo aliados. Abreviemos los trámites, suprimamos el papeleo; no hace falta esperar a que el tiempo nos vuelva a juntar. Y si sólo hubiera una opinión sería tan aburrido....

Atroz sospecha

En cuanto a conocernos a nosotros mismos... Me asalta una sospecha. ¿No estaré confundiendo el yo que quisiera ser, un gran tipo sin duda, con el yo que soy de verdad?. Una cosa es distinguir las actitudes aconsejables de las más pedestres, y puede que humanas, y otra adoptar esas actitudes en el día a día. O sea dominar la teoría (sobresaliente en teoría), y fracasar escandalosamente en la práctica (suspenso en los ejercicios). Me voy a tener que poner un tutor o profesor particular (imaginario) para vigilarme.

domingo, 16 de septiembre de 2007

El cuaderno

He comprado "El libro del desasosiego" (véase entrada del 29 de julio). Pedí a la dependienta un marcapágina (tengo uno de Penguin que dice "Go on, just one more page") y no tenía; y en su lugar me regaló un pequeño cuaderno. En la portada pone: Colección Guermantes; y luego: La literatura como protagonista. Parecía un librito, y al abrirlo y ver las páginas en blanco me quedé por un momento confuso. Un libro con las páginas en blanco, ¿para qué servirá?. Es un cuaderno, claro, y sirve para escribir en él. Así se hacía no hace mucho. No tiene rayas de referencia. Es un desafío y una tentación. ¿No sería hermoso llenarlo con renglones bien horizontales de letra uniforme y personal?

viernes, 14 de septiembre de 2007

Traduttore, traditore

El traductor es el traidor en el dicho italiano. Todos somos traidores cuando nos ponemos a contar, de palabra o por escrito, cualquier cosa; muchas veces en nuestro afán de hacer una historia más interesante, como si el interés de la historia nos hiciera a nosotros más o menos interesantes. Y luego están los periódicos. Casi siempre que sale una noticia de la que sé algo de primera mano, en el periódico aparecen varios datos erróneos que pueden referirse a casi cualquier cosa: El apellido, la edad, la profesión, las circunstancias exactas del suceso... Así que cuando la noticia es totalmente ajena a nosotros, ¿de qué nos podemos fiar?. Ya tengo avisado que aquí (en este blog) se cuelan los errores con toda naturalidad, aunque he cogido la costumbre de echar un vistazo en Google para evitar, en lo posible, meteduras de pata clamorosas. Así, ayer consulté la entrada sobre Petraeus en Wikipedia (en inglés). La misma mañana leo en el periódico una crónica desde Nueva York donde se asegura que Petraeus estuvo entre los cinco mejores de su promoción en West Point. Lo que dice la entrada en Wikipedia es que acabó dentro del cinco por ciento de los mejores, exactamente el 43... Lo cuento porque me divierte haberlo descubierto; no me voy a poner puntilloso ni en éste ni en ningún caso. Además me cae bien la corresponsal en Nueva York.

jueves, 13 de septiembre de 2007

Nombres

Ahora caigo en el parecido de "aprender" y "aprehender". Incluso en el significado, ya que la segunda acepción de "aprehender" es "llegar a entender". Cuando alguien (un premio Nobel, pongamos) vislumbra un concepto nuevo (nuevo para él en todo caso), si quiere aprehenderlo del todo, tiene que ponerle un nombre. El nombre define, limita, pero nunca del todo. Estoy en que con los nombres pasa como con las partículas y su principio de incertidumbre (Heisenberg) : En el momento en que nombramos algo ya estamos perdiendo parte de su esencia. Pasemos a los nombres propios. Cuando Ronald Reagan era presidente, el portavoz de la Casa Blanca se llamaba Donald Regan. Amazing. El comandante de las tropas de EEUU en Iraq se llama David Petraeus. Aventuro que se pronunciará algo así como "Petreus". No puedo imaginar un nombre que transmita más determinación, tesón, inflexibilidad. Quizás en el instituto hicieran alguna broma con el apellido... y seguramente tuvieron que disculparse.

miércoles, 12 de septiembre de 2007

La casa del lago

He visto "La casa del lago", dirigida por Alejandro Agresti (y diría que se nota el toque latino). Es, como he leído en una crítica, un drama romántico de lujo. También es un remake de una película surcoreana ("Il mare", que es el nombre del presunto restaurante más caro de Chicago. Tal restaurante no existe, aunque si hay uno llamado "Spiaggia"). La historia es el romance entre Keanu Reeves y Sandra Bullock que viven en 2004 y 2006 respectivamente y se cartean gracias a una simpática discontinuidad en el espacio-tiempo. A mí me recordó a esos otros romances hoy tan comunes a través del ciberespacio. Resulta algo lioso el ir ordenando cronológicamente la historia y el fallo gordo que le veo es la pirueta final, donde se saltan la regla de oro de los viajes en el tiempo: Lo que ha sucedido no tiene vuelta atrás. Admito, con una sonrisa, que las cartas viajen a discreción en el tiempo; pero la habilidad del guionista se demostrará si hace que todo cuadre sin tener que deshacer ningún hecho. En otro caso estaríamos hablando de mundos paralelos, y ésa ya es otra historia. (Un clásico al respecto: "Universo de locos" de Fredric Brown).

martes, 11 de septiembre de 2007

Sesión continua

Cuando acaba la película y empiezan a pasar los créditos, me pregunto: ¿Qué pasará después?. ¿Qué será de los personajes?. Puede que hagan la segunda parte, o toda una saga, sí, ¿pero qué pasa luego?. ¿Cuánto le dura la buena racha?. ¿Qué hará en vacaciones?. Incluso si el protagonista muere, ¿qué es del amigo, la viuda, los hijos?. En la vida no hay finales. O cada final lleva encadenado un nuevo comienzo. La vida se parece más a una sesión continua, aquellas en las que podías entrar al cine en cualquier momento de la proyección y luego quedarte a ver el principio de la siguiente. Y tú, claro, ya eres otro distinto del que entró y la película es, o parece, otra.

domingo, 9 de septiembre de 2007

Fotos

He llegado a la conclusión (poco profunda) de que si voy a un sitio pintoresco es casi mejor que no lleve la cámara de fotos. Por tres razones. Una, que es incómodo cargar con ella. Dos, que si estoy pendiente de sacar fotos no disfruto de la visita. Y tres, que las fotografías a menudo "mienten". Procuramos que la foto sea "bonita", si aparece alguien sonreirá... el mundo no es así. Es lo que pasa en los folletos turísticos: Todo es precioso, puedes apostar que una vez en el sitio no verás nada más hermoso que las fotos del folleto. Al revés, lo que aparecía en la foto es en realidad más pequeño, más gris, más sucio. Se diría que aquellas fotos verdaderamente robaron el alma del lugar.

sábado, 8 de septiembre de 2007

Preparativos

Me muero de ganas de escribir una poesía sobre el otoño. ¿No es romántico?. Cuento los días del final del verano para ponerme a ello. No quiero ser anacrónico. Voy preparando los ingredientes: Hojas muertas, suave lluvia, escalofríos, miradas brillantes, un paseo por la orilla de un río, un jersey, una canción de Aznavour. Descarto el termo de café con leche porque entiendo que incluirlo sería pasarme a la prosa; y yo lo que quiero es escribir una poesía sobre el otoño.

viernes, 7 de septiembre de 2007

Revelando mi rollo

"Revela tu rollo aquí", se anunciaba una tienda de fotografía. Google nos dice lo mismo: Revela tu rollo, escribe sobre lo que quieras, en un blog aquí. Y miles de personas se ponen (nos ponemos) a ello. Hay tantos rollos para revelar como ciudadanos, y la gente en general está deseando contar. Lo malo es que los deseos de escuchar son menores. Al revés de lo usualmente recomendado: Eres esclavo de tus palabras y dueño de tus silencios. Ahora que me doy cuenta, yo mismo debería estar leyendo blogs en vez de estar escribiendo éste.

jueves, 6 de septiembre de 2007

Felicidad y miedo

"La felicidad es la ausencia de miedo". Es la opinión de Eduardo Punset. Entonces deduzco que hay dos formas de ser feliz. Una, la de aquellos que, por pura inconsciencia, no temen a nada ni a nadie. Dos, la de los pocos que en el mundo han sido que han identificado y superado las causas de todos sus miedos. Por mi parte, como ya he dicho alguna vez (y lo que me repetiré), soy razonablemente feliz. O dicho de otra forma, en versión de Punset, salgo a veces de casa sin paraguas aunque amenace lluvia.

miércoles, 5 de septiembre de 2007

Socrático

"Gnosti te autvn", es griego escrito con caracteres latinos (gentileza del ratón del pc). Lo mismo en latín sería "nosce te ipsum". Y en castellano "conócete a ti mismo". Todos estos años y los hombres (algunos hombres y algunas mujeres) siguen en lo mismo. Otro eslogan con gancho: "Hágalo usted mismo". Más práctico.
Conocerse uno mismo parece conveniente, aunque a mí este lema me produce confusión. ¿Acaso no me conozco ya de sobra?. ¿No he sido precisamente yo quien ha vivido conmigo desde la más tierna infancia?. ¿Tan tonto puedo ser para no conocerme?. Probablemente no entiendo el mensaje. Quizás quiera decir que debería cambiar. O conocerme en un sentido más.. filosófico o transcendente o algo. O que debería pensar más antes de hablar (o de escribir en este blog).

lunes, 3 de septiembre de 2007

Mi enfermedad

Aunque no soy hipocondríaco me acabo de autodiagnosticar una enfermedad, si bien en estado latente: El mal de Montano. Nada grave, y menos aún teniendo en cuenta que las posibilidades de que la enfermedad se manifieste plenamente son mínimas por el hecho de que, parafraseando a Borges, "lo guardo todo en esa parte de la memoria que es el olvido". El descubrimiento del mal de Montano se debe a Enrique Vila-Matas. Afecta a aquellas personas (como el propio Vila-Matas, me temo) que buscan un referente literario en cada acontecimiento de su vida. Así, por ejemplo, cada vez que suban una escalera y encuentren una planta en el descansillo, recordarán la araucaria que aparece en una escalera (¿o era un vestíbulo?, maldita memoria...) de "El lobo estepario" de Hermann Hesse. O si alguien se muestra optimista sin razón aparente, apuntarán la opinión de Mario Benedetti de que contra el optimismo no hay vacunas. Y así hasta la extenuación. Esta enfermedad puede llegar a ser muy penosa para el entorno familiar del afectado.

Talones de Aquiles

Comentarios hechos en un documental de 1983 sobre Phil Spector (Spector, ¿no es un nombre de villano de película de James Bond?, tuvo su buena ración de gloria como productor musical; ¡produjo el "Imagine" de John Lennon!): Es un tipo difícil, de carácter, un genio, oscuro, peculiar... de alguna forma tiene algo de vulnerable. Vulnerable, que puede ser herido. Más sicológica que físicamente, entiendo. Hablamos de lágrimas; reales a veces pero casi siempre interiores. Hablamos de llorar. Somos vulnerables, soy vulnerable. A mi pesar.

domingo, 2 de septiembre de 2007

Pequeño viaje

Mi última aventura ha sido ir nadando hasta la plataforma que flota a unos cien metros de la playa. No parece gran cosa, admitido, pero el mar estaba algo revuelto y a medio camino he sentido... miedo. ¿Y si sufro de pronto un calambre?. ¿Se daría alguien cuenta?. Prudentemente he procurado flotar de espaldas y ponerme en "máximo ahorro de energía". Algo así como la navegación silenciosa del submarino Seaview. El ligero oleaje no me dejaba apreciar si avanzaba o no. Mi prioridad era que no me entrara agua en la boca, así que espiaba las olas para contener la respiración cuando la cresta me alcanzaba. Así, sin batir ningún record, he llegado a la plataforma. Se movía la condenada. Había algunos chavales, y de pronto uno de ellos ha exclamado alborozado: "¡Mirar, mirar, una cosa negra, se mueve!". Lo que me faltaba.. He recuperado el aliento y esperado el momento en el que el "avistamiento" se colocara en el lado opuesto de la plataforma para meterme de nuevo en el agua y dar unas enérgicas brazadas de vuelta hacia la playa. Luego, por si los calambres, he seguido nadando lentamente. Ahora si que me parecía que las olas me ayudaban empujándome. Por fin he hecho pie y he salido del agua orgulloso y satisfecho...

sábado, 1 de septiembre de 2007

Aves en el cielo

Hay quien opina que si te expresas con propiedad no hace falta utilizar adjetivos. Otros gustan de adjudicar dos o tres a cada nombre. Yo me conformo con usarlos de uno en uno, y así diré que me he encontrado con esta sugerente frase: "Incluso cuando el pájaro anda, se nota que tiene alas". Es un verso de Lemierre citado por Rafael Reig. Otro francés (un tal Loyson, Reig dixit)) le dió la vuelta: "Incluso cuando el pájaro vuela, se nota que tiene patas". La cuestión es si andamos, volamos o sólo dormimos. ¿Se le nota algo al pájaro cuando duerme?.

viernes, 31 de agosto de 2007

Entropía

Reentrada en la atmósfera. No hace falta que calcule el ángulo. Lo peor que podría pasar es que el blog se desintegrase. Sólo sería adelantar algún tiempo su final. Así lo exige el segundo principio de la termodinámica. La entropía siempre aumenta. La entropía mide el desorden del universo. Por mucho que nos empeñemos en ordenar; tarde o temprano se desordenará, engordando la entropía. Y yo me lío; porque cuando pase el tiempo y caigan todas las torres, y el mismo tiempo muera al llegar el momento en que nada se mueva, ¿no será entonces el orden perfecto?. Desde luego que hará mucho frío...

lunes, 20 de agosto de 2007

Sueña que sueña


Acabo de ver "La flaqueza del bolchevique". Me ha gustado. No he leído la novela de Lorenzo Silva. Ya conocía esta fotografía, que aparece en la película, de las cuatro hijas del último zar de Rusia: Olga, Tatiana, María y Anastasia. Saudade. Y subrayando una situación de la película suena esta canción.
Standby - Extremoduro.
Siguiente estación, septiembre.

sábado, 18 de agosto de 2007

Perdonar al réprobo

Los remordimientos son una forma como otra cualquiera de estar mal, de sufrir. La palabra es ya horrible. Morderse una y otra vez a uno mismo. ¿Te has mordido, no metafóricamente en este caso, la lengua recientemente?. Algo muy malo debemos haber hecho para tener remordimientos... En todo caso, nadie es perfecto (Billy Wilder) y pensándolo bien hay que seguir el consejo no de Hannah Arendt, ni de Susan Sontag, sino de Concha Velasco: "He aprendido a perdonarme". Intentemos no repetir los errores, pero no nos castiguemos más de lo estrictamente necesario. Seamos magnánimos, generosos y amantes con nosotros mismos (y con los demás). Amén.

viernes, 17 de agosto de 2007

Problema

Un hombre sueña, con un coeficiente de 0,04 durante el día y de 0,85 al acostarse y hasta caer dormido, con vivir en un mundo más amable para él. Despreciando el tiempo que emplea en actividades rutinarias y en hablar del tiempo, teniendo en cuenta que trabaja en el sector bancario por las mañanas y que dedica las tardes a hacer deporte, leer novelas, ir al cine, pasear, tomar algo con los amigos y planear las vacaciones, y suponiendo que su situación familiar es estable (casado con dos hijos, no tienen perro) 1- ¿Podemos afirmar que es un iluso? 2- Si consideramos que en un 15% de las madrugadas se despierta sobresaltado, ¿hay alguna posibilidad de que sea feliz?.

jueves, 16 de agosto de 2007

De capitanes intrépidos

"Nursery rhyme" es el equivalente inglés a canción infantil. Me he tropezado con ésta: "Sticks and stones will break my bones, but words will never harm me". O sea, "palos y piedras me romperán los huesos, pero las palabras nunca me dañarán". Práctica enseñanza para los niños, para sobrevivir en el patio de la escuela... y en otros ámbitos. Es un signo de fuerza, de autoestima, de madurez, oir un comentario desfavorable o incluso un insulto y saber reaccionar con "elegancia". Un insulto es solo una palabra; casi siempre denigra más al que lo profiere que al que lo recibe. Un valentón responderá con un insulto más sonoro. Callar y sonreir puede ser la reacción de un valiente.

miércoles, 15 de agosto de 2007

Distintos.

Parece ser que en Japón es de mala educación decir que no... Un japonés que inclina la cabeza sonriente puede que esté pensando algo de este estilo: "La verdad me caes muy gordo y ni en mil años accederé a lo que me pides, pero sonreiré hasta que me salgan agujetas en los músculos de las mejillas". Lo que quiero decir es cuantas cosas hacemos porque así se hace en nuestra cultura. Las distancias físicas que mantenemos en una conversación, todos los gestos, las miradas, el tono de voz. Todo son códigos aprendidos. Cuantos malentendidos surgen cuando interpretamos erróneamente signos que para el otro significan otra cosa; solo por el hecho de ser de otro país, o del pueblo de al lado sin más. Hay mil formas de comportarse, y ninguna es la mejor.

martes, 14 de agosto de 2007

Los cerezos en flor.

Conocí a R. por medio de otro amigo común. Le traté durante años y con más frecuencia cuando se mudó a una casa cercana a la mía. Un día, tomando una cerveza en una terraza, me confesó que padecía una enfermedad incurable de la vista. Miraba a lo lejos al contármelo, hacia las montañas... pero quizás ya no las veía. Según los médicos era cosa de meses que se quedara completamente ciego. Puse mi mano en su antebrazo, y él con voz trémula me dijo que lo que más deseaba en aquel momento era volver a su valle natal y poder ver por última vez los cerezos en flor. Pasó el tiempo. Ya ciego se trasladó a vivir con una hermana y nunca hizo ese viaje. Perdimos el contacto. En marzo de este año me tocó, por motivos de trabajo, pasar a pocos kilómetros de su pueblo. Recordé toda la historia al ver el rótulo en la desviación y llevado por un impulso me desvié de mi ruta y me interné en el valle. En el bar-tienda de la plaza la dependienta pareció recordar vagamente a R. Cuando le conté aquel deseo suyo de ver por última vez los cerezos en flor, me dijo: "¿Cerezos?, aquí nunca ha habido cerezos; almendros sí...".

lunes, 13 de agosto de 2007

Sentir y pensar

"Cogito, ergo scribo", "pienso, luego escribo", sería un posible lema para bloggers. No es que yo piense mucho; lo justo. Sentir es ineludible. Pensar es opcional y posiblemente resta protagonismo al sentimiento. El mundo se divide en dos clases de personas (esta frase siempre crea cierta atmósfera de expectación), los que sienten mas que piensan y los que piensan más que sienten. Los que se limitan a sentir nunca se sentirán inclinados a escribir sobre sus sentimientos. Eso lo hacen los que piensan. Así, siempre nos llegará una versión sesgada de la vida. Paradójicamente nunca sabremos la opinión de los que la viven más plenamente (precisamente porque se dedican a vivirla y no pierden el tiempo reflexionando y escribiendo sobre ello). Entre pensar y sentir, yo soy de los que piensan sentados.

domingo, 12 de agosto de 2007

Ferragosto

Se acerca Ferragosto. Es como se refieren en Italia al 15 de agosto. En su origen era la fiesta con la que se celebraba el final de las labores agrícolas. Pensaba yo que era una forma de referirse al calor sofocante en italiano. Casi todos los veranos oía en la tele al corresponsal en Roma comentando que algo había sucedido "en pleno ferragosto". Me gustan estos días de agosto porque parece que vivo en otro país. El tiempo es bueno y las calles están más tranquilas que nunca.
En la película "La escapada" de Dino Risi (Il sorpasso), la narración comienza así: "Nella Roma deserta di un ferragosto qualunque" (en la Roma desierta de un ferragosto cualquiera).

sábado, 11 de agosto de 2007

Uptempo

Quisiera agradecer al tipo que escribió la canción que hizo que mi chica se enamorara de mí. ¿Quién puso el bom en el bom-bo-bom-bo-bom?, ¿quién puso el ram en el rama-lama-ding-dong?... Así empezaba la canción "Who put the Bomp" (de Barry Mann), homenaje a las canciones uptempo de los grupos vocales que inundaron América en los años cincuenta y sesenta. Canciones animadas llenas de onomatopeyas. Muchas se vuelven a escuchar hoy en películas y anuncios. Trepidantes y saltarinas, divertidas y estimulantes. El doctor Duro recomienda una dósis de doo-wop uptempo para las mañanas melancólicas (y a los niños les encanta).

viernes, 10 de agosto de 2007

Over the lake

Me gustan los lagos. En el reparto de lagos, estos pagos quedaron prácticamente huérfanos. Ha sido el hombre el que, represando los ríos, ha conseguido unas notables imitaciones. Estos pantanos siguen siendo bellos. La combinación de agua, vegetación, cielo y puesta de sol es imbatible a efectos estéticos. En el reparto de lagos se les fue la mano con Finlandia. En Suecia también debe de haber muchos. Una vieja ensoñación mía es visitar algunos de esos lagos. En verano, claro. Los largos días del corto verano nórdico. De mi experiencia con lagos me quedo con una tarde que hice footing por la orilla del lago Leman a principios de un sorprendentemente caluroso septiembre. Seguía los senderos junto al agua, pasaba por pequeños embarcaderos. Algunas nubes de mosquitos me recordaban que la belleza se paga.

miércoles, 8 de agosto de 2007

Futuras técnicas del CSI.

Igual que el aura no se ve a simple vista, tampoco se ve el "rastro" que va dejando a nuestro paso. Se trata probablemente de un número muy pequeño de moléculas que quedan suspendidas en el aire. En condiciones muy específicas, que se han intentado reproducir en laboratorio sin haberse aclarado nunca del todo si ha sido con éxito, parece ser que se puede llegar a ver como una difusa línea fosforescente. Esta huella es indeleble, y por tanto toda nuestra vida queda plasmada en esa especie de hilo que se va desmadejando detrás nuestro. Un investigador curioso, del CSI claro, podría con el tiempo llegar a repasar todos los movimientos de una vida. Se podrían dibujar en un mapa todos nuestros movimientos, las ciudades en que hemos estado aparecerían como emborronadas y los viajes serían líneas nítidas siguiendo las carreteras o ligeras curvas en el caso de viajes aéreos.
Desarrollando más la técnica se podría datar cada trazo de ese dibujo y así comparando los "mapas vitales" de dos personas (enamoradas) veríamos cuando y donde han estado juntos. Aumentando la escala llegaríamos a saber por qué calles han paseado juntos, incluso dónde se detuvieron y estuvieron abrazados...

martes, 7 de agosto de 2007

De la tristeza

Se atribuye a Galeno (médico griego) la frase "Triste est omne animal post coitum", o sea "todo animal está triste después del coito". Puede ser, tiene lógica; en cualquier caso es una frase bonita (tiene la belleza implícita en la melancolía). Pero el dicho completo sigue con "praeter mulierem gallumque", "excepto las mujeres y los gallos"... y ahí ya no lo capto.
Schelling, filósofo alemán, atribuye a la existencia humana una tristeza fundamental e ineludible.
George Steiner, intelectual francés, publicó hace dos años un libro titulado "Diez (posibles) razones para la tristeza del pensamiento". El "posibles" entre comillas me gusta y me recuerda la cerveza Carlsberg (posiblemente la mejor del mundo). El "del pensamiento" final le quita toda la gracia al título. Supongo que la exactitud filosófica del tema lo requería.
En todo caso debo aclarar que no estoy triste, salvo esa base (cual ruido de fondo cósmico residuo del big bang) inherente al pensamiento humano.

lunes, 6 de agosto de 2007

Confesando mi ignorancia

Tengo un compañero que trabajó como ayudante de cámara cuando las noticias se grababan en cine, en celuloide (hace mucho, sí, unos veinticinco años). Cuando se pasó a utilizar el video solía decir que para él aquello era magia. Podía comprender el proceso de impresionar una película y luego revelarla (similar a la fotografía) pero se le escapaba el "secreto" de la grabación magnética de la señal de video, con su posibilidad de reproducirla al instante. Es lo que me pasa a mí con los buscadores de internet. ¿Cómo es posible que en décimas de segundo el buscador Google, a partir de unas palabras que tecleo desde mi rincón del mundo, me ofrezca una lista de cientos de miles de páginas?. ¿Es posible que para ofrecerme esa lista haya inspeccionado todas las páginas de todos los servidores del mundo?. Las oficinas centrales de Google están en California (I wish they all could be California girls...), en Mountain View donde trabajan miles de personas. Sé lo que hace un equipo de estos trabajadores: organizar el transporte gratuito para unos 1500 empleados. Me intriga qué es lo que hacen los demás. Aparte de los que cuentan el dinero, me gustaría saber como puede organizarse y como puede duplicarse cada año la plantilla de tal empresa. Y no estar loco.

domingo, 5 de agosto de 2007

En la última sala del laberinto

Este blog tiene ya más de doscientas estancias. Un auténtico laberinto con letreros que confunden más que aclaran: Misterios, frases, sueños... Y no cuesta lo que vale, o no vale lo que cuesta. Me cuesta a mí el pequeño esfuerzo de escribirlo y es casi gratis para cualquiera que lo visite. O muy caro, según se mire. Y vale lo que su último post, lo que su última entrada. Porque al visitante le interesa esta última estancia (bueno se asoma a ella curioso y cuando ve que solo hay bla bla bla sigue su camino) y normalmente no se aventura en aquellas otras escritas hace un, dos, seis meses. Se diría que de entrar en ellas dejaría sus huellas en la capa de polvo que ya empieza a cubrirlas. Y yo quisiera gritarle, ¡eh!, ¡que te pierdes lo mejor!. Pero el curioso tiene mejores cosas que hacer, aunque no sean casi gratis como leer este blog.

sábado, 4 de agosto de 2007

Gira el mundo, gira

¿Qué hace que el mundo siga girando?. ¿El dinero?, ¿la inercia?, ¿las leyes de la física?, ¿la ley del más fuerte?, ¿el amor?. El amor sí, era fácil la pregunta. Pero no el amor en activo, no el amor neto, no el amor cinético; sino el amor posible, el amor bruto, el amor potencial, la esperanza de amor, las ansias de amor. Por eso los Beatles cantaron "All You Need Is Love", todo lo que necesitas es amor. El amor que no tienes, o lo que le falta al amor que ya tienes para ser perfecto, para ser una entelequia. Eso es lo que hace que el mundo siga girando.

viernes, 3 de agosto de 2007

No entiendo

Una de las preguntas habituales de los cuestionarios a famosos (del verano) es aquella de ¿perdonarías una infidelidad?. Un tanto por ciento sorprendentemente alto de los entrevistados contesta algo del estilo de "una infidelidad quizás sí, pero una deslealtad nunca"... Siguen, lo sepan o no, la estela de García Marquez, y sus razones tendría Gabo para decirlo (hay que ser infiel, pero nunca desleal). Yo no acabo de entenderlo. Según el diccionario, infidelidad significa falta de fidelidad, deslealtad. Son sinónimos. Si se refieren a una infidelidad puntual, yo diría que ha habido también una deslealtad puntual.

jueves, 2 de agosto de 2007

Matizo

Todos los días me equivoco, y hoy también lo he hecho. Ruego pues al lector que tenga en cuenta que cualquier parecido con la realidad en los datos que doy en este blog es pura coincidencia. Más que nada porque la realidad es tan huidiza... Por una vez voy a matizar mi entrada anterior. La frase sí que era "el medio es el mensaje" y ese era el título del libro que Marshall McLuhan quiso publicar en 1967. Pero por un error tipográfico en la portada apareció "massage" y McLuhan reaccionó pidiendo que se mantuviera el nuevo título, que le parecía que encajaba perfectamente. Y así se ha publicado desde entonces en inglés.

Galaxia Gutenberg: El imperio contraataca

La evolución de la comunicación entre humanos desde la invención del lenguaje hablado hasta lo que sea que ha aparecido hoy mismo, da que pensar. Marshall McLuhan se tomó sus molestias y habló de "la galaxia Gutenberg" (1962) como una fase que empezó con la difusión de la imprenta y el paso de una forma de comunicarse casi exclusivamente verbal a otra basada en la palabra impresa. Lo que predecía McLuhan era que con la aparición de los medios electrónicos y especialmente de la televisión tenía lugar otra revolución y volvía a recuperar terreno la comunicación oral (y en aquel año ya lejano se sacó de la manga la expresión "global village", aldea global). Confieso que hace unos años empecé a leer aquel libro... y llegué hasta la mitad. McLuhan tuvo sus cinco minutos de gloria profetizados por Andy Warhol cuando hizo un cameo como él mismo en "Annie Hall" (1977). Antes en 1967 acuñó su famosa frase: "El medio es el mensaje"... solo que, maldita sea, no dijo eso. La frase literal fue: "The medium is the massage", o sea "el medio es el masaje", y se refería a que los medios de comunicación, de alguna forma, masajeaban nuestros sentidos.
Como suele ocurrir la evolución de la comunicación ha seguido por caminos sorprendentes y a velocidad de atracción de feria de alto riesgo. La letra impresa vuelve a brillar como nunca en SMSs, chats, msn, blogs y páginas y páginas de información en Internet. Aunque los alarmistas insistan que con la televisión y la play station las nuevas generaciones se están volviendo iletradas, yo, como los Panchos, lo dudo.

miércoles, 1 de agosto de 2007

Reacciones posibles

Muchas veces me pregunto, e incluso me preguntan, que hubiera hecho yo en una determinada situación. Sólo sé responder lo que la razón me dicta. O lo que no puedo evitar hacer. Imaginemos que soy el protagonista de una película y estoy en un coche con la chica a punto de besarnos y de pronto ella se libera de mi abrazo, accionando sin querer las escobillas del limpia-parabrisas en el movimiento de los brazos, y se baja del coche diciendo "no puedo, no puedo", ¿qué harías?, ¿a, salir detrás intentando alcanzarle o b, quedarte sentado en el coche?. Yo haría c, parar el limpia-parabrisas.

martes, 31 de julio de 2007

La bestia en mi

Ella: ¿Te duele algo?
Él: Mmmm... no.
Ella: ¿Seguro?
Él: Seguro, seguro... ¿por qué?
Ella: Por el dicho
Él: ¿Qué dicho?
Ella: A partir de los cuarenta...
Él: No te quites el sayo
Ella: ¡Bicho!
Él: El bicho en mí.
Ella: El bicho en ti...
Él: Eso me duele, the beast in me
Ella: Bonita canción
El: Autobiográfica...

The beast in me
Is caged by frail and fragile bonds
Restless by day
And by night, rants and rages at the stars
God help, the beast in me
The beast in me
Has had to learn to live with pain
And how to shelter from the rain
And in the twinkling of an eye
Might have to be restrained
God help the beast in me

Sometimes
It tries to kid me that it's just a teddy bear
Or even somehow managed
To vanish in the air
And that is when I must beware
Of the beast in me
That everybody knows
They've seen him out dressed in my clothes
Patently unclear
If it's New York or New Year
God help the beast in me
The beast in me

The Beast In Me - Nick Lowe

lunes, 30 de julio de 2007

Verano

Los largos días del verano. Hoy he visto una trilladora segando un campo de trigo. Cuando veo un campo recién segado, o las cepas rebosantes de uva o los canales de regadío de alguna huerta, me viene a la cabeza el título de Hesíodo: "Los trabajos y los días". Me pasan por la cabeza las cuatro estaciones a cámara rápida, como en esas películas que se ve amanecer o anochecer en unos segundos mientras las nubes pasan a velocidad de vértigo. El ciclo de la vida, desde la semilla al fruto. Al atardecer la vida se ralentiza y es el momento de pasear hasta la orilla del río y sentirse bien sólo con oir el agua fluir, sentir la brisa en la cara, ver al sol esconderse detrás de las montañas. El placer elemental de sentirse vivo.

domingo, 29 de julio de 2007

Desasosiego

Ricardo Reis, Alberto Caeiro, Álvaro de Campos, Bernardo Soares... son los heterónimos de Fernando Pessoa. Casi diría que la palabra "heterónimo" no adquirió todo su significado hasta que Pessoa puso en marcha su maquinaria literaria. Yo me fui enterando poco a poco de su existencia. Se le citaba de pasada. Diversos escritores confesaban su influencia. Fui creando expectativas sobre "el libro del desasosiego". Desasosiego... Buscamos la tranquilidad de espíritu, el sosiego; porque lo que tenemos es precisamente el desasosiego. Apunté en el cuaderno de notas rojo de mi mente el título y el autor. Lo olvidaba y con la adquisición de nuevos detalles (Pessoa dominaba el inglés porque se educó en Sudáfrica, Saramago escribió "en la muerte de Ricardo Reis") recordaba nuevamente mi cuenta pendiente. Así un día me encontré en la librería Espasa de Madrid, junto a la Puerta del Sol. La colección Austral completa en las estanterías. Busco y rebusco y encuentro "el libro del desasosiego"... Pero el tamaño de la letra resulta imposible. Microletra. Desisto. Pasa el tiempo y estoy en Cascais, cerca de Lisboa. El recuerdo de Pessoa es mas acuciante al encontrarme cerca de los cafés que le inspiraron. Hay una feria del libro con sus tenderetes por la calle. En uno de ellos, lo veo: "O livro do desassossego". Lo hojeo, me tienta. Pero me digo a mi mismo : ¡está en portugués!, no entenderás los matices. Lo dejo con pena. Hace un par de semanas estoy curioseando en "la casa del libro" y me lo tropiezo de repente. Lo sostengo entre las manos, paso algunas hojas... Letra clara, edición impecable. Ya está, me digo, no tengo excusa. Pero no lo compro ese día (ya había comprado otro). Ahora tengo un dilema. ¿Lo compro, y lo leo y así acabo con el desasosiego de no haberlo leído; o no lo compro, y no lo leo y así mantengo esa ilusión de saber que hay un libro que muy probablemente me ayudará a combatir el desasosiego?.