lunes, 31 de marzo de 2008

No particular thing to tell

Escribo por inercia. Me he acostumbrado a teclear aunque no tenga nada en especial que contar. Yo empiezo y ya se me ocurrirá algo. Sin el pánico al folio en blanco, pues nadie me obliga ni tengo ningún plazo que cumplir. Y si al final no se me ocurre nada, pues bien. Esto es metaescritura. Escribir sobre escribir. Es como tener nostalgia de la serie "cuéntame", sería tener nostalgia de la nostalgia. O sea metanostalgia. No he estudiado nunca griego, pero creo que "meta" significa "más allá". Escribo y me sicoanalizo. No tengo nada que decir (en particular) pero hablo. Es gratis. ¿Importa lo que escribo?. ¿Llego a decir algo al final?. Es complicado...

sábado, 29 de marzo de 2008

A veces no entiendo

Pasa a veces que leo una novela y no la entiendo. Dos ejemplos. "Zazie en el metro" de Raymond Queneau. Una niña viaja en metro. No entendí más. Pensando mal puedo atribuir mi incomprensión a la labor del traductor, que era Sanchez Dragó. Pero no, asumo mi responsabilidad. Soy falible como el Papa en asuntos no religiosos (que tiempo hará, por ejemplo), y sencillamente no les vi ningún sentido a las peripecias de Zazie. Segundo ejemplo: "Seda" de Alessandro Baricco. Un libro bien cortito donde un comerciante va y viene al oriente y en cada viaje el autor repite algunos párrafos supongo que con fines sutilmente literarios. O tal vez sólo por ahorrar gasolina.Varias mujeres aparecen implicadas en la acción (escasa por otro lado). ¿Y qué?. No sé, no entiendo. Fue un éxito espectacular de ventas pero a mí me pareció un cuento como mucho enigmático. El fallo es mío, seguro.

viernes, 28 de marzo de 2008

Tristeza

Ha muerto un primo mío. También se puede decir, se ha muerto, o se me ha muerto. Pero a quien se le ha muerto es a su mujer. A su mujer que le llamaba pichín. Incongruentemente, pero sólo en apariencia, porque mi primo llevaba una gran barba cana y era más pesado que ligero. Como casi siempre pienso que no le conocí del todo. Somos extraños para casi todos, parientes o no (o por lo menos ese es mi caso). Siempre se mueren los otros y cuando yo muera (o me muera) también habrá sido otro para los que queden. Qué solos se quedan los muertos. Qué solos se quedan los vivos.

jueves, 27 de marzo de 2008

Pioggia

Llueve, y somos más agua que nunca (my friend). Piove (sul nostro amor) cantaba Domenico Modugno en una canción que se va hundiendo en el tiempo. "Piove?, porco governo!" es un conocido dicho italiano... o eso dicen. Lo he puesto en Google y el resultado ha sido curioso: Tal dicho literal sólo aparece en páginas en castellano (y algunas en catalán) y prácticamente en ninguna en italiano. El que sí es un dicho italiano es "piove, governo ladro!". Supongo que la palabra "ladro" (ladrón) es menos conocida y llamativa para el oído español que el sonoro "porco". El caso es que piove.

miércoles, 26 de marzo de 2008

Fábrica

Cada día fabricamos un día del pasado. Más o menos redondos, similares, felices, tristes pero eternos. Quedan ahí para que podamos recurrir a ellos e intentar dar sentido al día en curso, que está a medio hacer. Me sorprenden los días, meses, años, décadas que quedan perfectamente ordenados por orden cronológico. Consultables en las hemerotecas, el outlook, los blogs y la wikipedia. El futuro pasado por el tamiz de la realidad. 1984 de George Orwell y David Bowie convertido en resaca. 2001 una odisea del mañana que pasó ayer. Estamos empaquetando el final de la primera década del siglo XXI. Que no decaiga la producción.

martes, 25 de marzo de 2008

Me desperté esta mañana

Woke up this morning... eso me ha pasado esta mañana, y ayer, y antesdeayer. Hay sitios donde la renta per cápita es de un euro al día. Hay días en que solo me salen frases inconexas. Todos los días gasto un euro en comprar el periódico. Todos los días compro, o me compran, el pan. Muchos días me tomo un café cortado. Ya voy por los tres euros, que me parecen bien gastados porque me gusta el cortado calentito y su efecto en mi organismo (lo más parecido a drogarme), me gusta el pan y leo atentamente el periódico con todas sus noticias repetidas y con sus apreciadas noticias sorprendentes. Best things in life are free, las mejores cosas de la vida son gratis. Las siguientes mejores cuestan un euro.

lunes, 24 de marzo de 2008

No hay bien que por mal no venga

Yo he sido tímido y aún lo soy, pero menos. Dijo un día mi abuela de mí (y yo lo oí): "Éste es como una ostra boca abajo, igual que su abuelo". Lo de la ostra no hizo sino confirmar lo que ya sabía, aunque no me dejó de disgustar. Que mi abuelo fuera igual (parecido) me agradó, al menos no era un caso único en la familia. Además mi abuelo no se desenvolvía mal en sociedad, lo que me dió esperanzas. Pero todo se puede mirar desde distintas perspectivas; dice Ciorán: "La timidez, fuente de tanto infortunio en la vida práctica, es la causa directa de toda riqueza interior". Tiene lógica y yo debo ser millonario interiormente. Añadiría que la timidez enseña a estar solo (a la fuerza ahorcan), cosa que no viene nada mal. Una vez que he aprendido a convivir con mis demonios estoy preparado para convivir con cualquiera.

viernes, 21 de marzo de 2008

Pibes

Hace tiempo que no coincido con Castillo. Desde que le cambiaron de departamento apenas nos hemos saludado de pasada un par de veces. Castillo siempre iba (va) impecable, en especial lleva los zapatos relucientes, aún en días de lluvia. Al poco (tiempo) de conocerle, comentando antecedentes y conocidos resultó que un primo suyo y yo habíamos estudiado juntos. Su primo se apedillaba Castillo también (una de las consecuencias posibles de ser primos) y había estado en mi clase en COU (curso de orientación universitaria). Debido a esto el primer Castillo decidió que eramos algo más que compañeros de trabajo. Teníamos un pasado común a través de su primo y a veces salía en la conversación como un guiño de complicidad. Castillo, el primo, estuvo en el colegio sólo ese último curso de COU. No estoy seguro pero creo que estudiaba con la ayuda de una beca y era el hijo del conserje, o del encargado de mantenimiento o quizás era huérfano. El año siguiente empezó la carrera de ingeniero y no he sabido más de él. Tampoco he encontrado la ocasión de preguntárle a su primo (el de los zapatos relucientes). Recuerdo a Castillo en el colegio vestido con un jersey verde, con la tez clara y el pelo rizado y tendiendo a pelirrojo. Le recuerdo nervioso, mirando a un lado y a otro, quitándose las gafas y jugando con ellas (si hubiera tenido gafas, pero no tenía). Quizás se sentía distinto de los demás alumnos de pago. A mí me parecía distinto, me avergonzaba el hecho de que hubiera becarios, de que el mundo fuera injusto. Una vez alguien se metió con él. No conozco los detalles, cuando yo llegué ya había terminado la pelea. Castillo se había enganchado con el bromista y le había derribado con una especie de llave de judo y luego le había dejado marchar. Fue en las puertas de la capilla del colegio y cuando llegué estaba allí de pie, mirando a lo lejos. Dijo algo de la rabia que le daba haber tenido que pelearse y no hacía nada por limpiarse las lágrimas que se deslizaban por sus mejillas, como si no se diera cuenta de que estaba llorando.

Dibujar, vivir o morir

"Draw or die", dibujar o morir, es el lema que ha aparecido alguna vez en los comics de Robert Crumb. Y es a lo que se dedica R. Crumb, a dibujar. Su mujer y su hija también lo hacen. Crumb vive en el sur de Francia, un sitio donde buscan tranquilidad muchos artistas ingleses o americanos. Una casita en la campiña francesa. Lástima del idioma y de mi cuenta corriente (que es corriente y además moliente). Dibujar da sentido a la vida de Robert Crumb. La cosa es seria: Robert tenía un hermano mayor, Charles, que fue el que en su infancia empujó a Robert a dibujar comics. Era lo que se suele llamar "el auténtico genio de la familia", pero finalmente quedó en un segundo plano y tras una vida de reclusión y problemas emocionales acabó suicidándose. Así que Robert Crumb dibuja. ¿Y yo qué hago?. Por un lado no sé hacer nada especialmente bien, por otro lado todo me cansa. Mi lema sería "vivir o morir", sin más (y no dudo en la disyuntiva). Como he oido un par de veces decir a alguien en momentos plácidos de la vida: "Para vivir así, mejor no morir".

jueves, 20 de marzo de 2008

Refugio de sueños

Dentro de nuestra campaña a favor de la lectura, recojemos aquí otra bonita frase debida a la pluma (o al bolígrafo) de Rafael Azcona: "Los libros son el lugar donde se refugian los sueños para no morirse de frío". La dice Fernando Fernán Gómez, el maestro, en "la lengua de las mariposas" (que es espiriforme). La película está basada en los cuentos de Manuel Rivas, pero esta frase concreta es algo que añadió el guionista, Azcona, y que hizo fortuna. Aunque diría que su contenido en azúcar es alto, me gusta.

miércoles, 19 de marzo de 2008

Me lo dirai

Una forma de comenzar el día con energía y con un producto totalmente natural es escuchar esta canción de los "gatos salvajes". No acabo de entender toda la letra. Si alguien la entiende y se quiere tomar la molestia... Yo me quedo con la frase "un amor grande come il mar" y con el punteo (eléctrico) de guitarra.
Me lo dirai - Les Chats Sauvages

martes, 18 de marzo de 2008

Deshilachado

A veces empezamos la casa por el tejado, otras ni tan siquiera sabemos que estamos haciendo una casa e incluso otras veces empezamos por los cimientos. Si óptimo es el superlativo de bueno y pésimo el de malo, ¿por qué nos deberíamos dividir en optimistas y pesimistas?. Sólo unos pocos entran en esas categorías extremas. Los demás somos mejoristas, buenistas, regularistas, malistas o peoristas, por ponerles nombres a las condiciones intermedias. Yo, en particular, soy un malista que cree que, por el bien de todos, es más conveniente aparecer como buenista. En cuanto al título, he sentido esta mañana el impulso de incluir esa palabra, deshilachado, en esta entrada. No sabiendo donde colocarla al final la he puesto en ese lugar de honor. No queda mal.

lunes, 17 de marzo de 2008

Ideas de bombero

Che idea!, ma quale idea?... Pensar algo, tener una idea es un suceso que se me antoja altamente improbable. En mi caso quiero creer que a veces atisbo, intuyo algo y luego compruebo que otros lo han visto más claro y lo han dejado escrito. Juan José Millás ha dicho: "Tengo tantas ideas ajenas que no queda sitio para las propias". Las ideas ajenas nos llenan la cabeza. Hay que escojer las mejores y aún esas con reservas, no vaya a ser que sean equivocadas. En cuanto a las ideas propias, y no me refiero a las de bombero, ¡quien las tuviera!.

domingo, 16 de marzo de 2008

Él y yo

El hombre había estado dormido, pero aún no estaba despierto. Sabía que estaba en la cama (en una cama) , se sentía horizontal en la penumbra azul de una habitación. Se movió para quedar boca arriba y mientras distintos músculos se iban numerando y proclamando su presencia pensó que no sabía bien del todo quien era ni donde estaba. Sólo notaba la sensación placentera de haber dormido lo suficiente, de estirar las articulaciones, de estar vivo. Poco a poco se fue dando cuenta de que él era yo.

sábado, 15 de marzo de 2008

Mundo grande o pequeño

"Nuestro pequeño mundo" fue un grupo folk de los años setenta y son tres palabras que me vienen a la cabeza de vez en cuando. Nuestro pequeño mundo, los pocos escenarios donde nos movemos, la poca gente que conocemos, las pocas ideas que manejamos. Mi pequeño mundo, mi concha de caracol, mi soledad. Esa sensación de estar irremediablemente perdido. Como suele pasar, en realidad el nombre de aquel grupo se refería a lo contrario, a que nadie nos es ajeno, a que podemos cantar las canciones tradicionales de cualquier parte y hacerlas nuestras. Sentían que podían abarcar el mundo con los brazos, porque al final todos somos humanos, iguales (o parecidos).

viernes, 14 de marzo de 2008

Frase redonda

"Un novelista es alguien que no tiene nada que decir y no sabe cómo decirlo". Es una frase que le gusta a Cesar Aira, y que me gusta a mí también (aunque mi opinión sea mucho menos cualificada). Está tan redondeada, la frase, que resulta contradictoria: Si no tiene nada que decir no es necesario que sepa como decirlo ya que basta con que esté callado. El quid de la cuestión (y por cierto "squid" es calamar en inglés) está en que el novelista escribe de todos modos, por inercia vital, y nos cuenta una historia, la que sea. Y al final, si la novela es buena, ha dicho algo y ha sabido como decirlo.

jueves, 13 de marzo de 2008

Descubierto

Haciendo tests de personalidad más de una vez me he encontrado con una pregunta que se empeñaba en aparecer una y otra vez bajo formas burdamente semejantes. Algo de este estilo: En una reunión social, ¿usted tiende a ser el centro de atención o se queda en un segundo término?. Y al de siete preguntas: En una conversación, ¿lleva usted la voz cantante o prefiere más bien escuchar?. Y poco después: ¿Disfruta hablando en público o es algo que le causa angustia?. Llega un momento que ya me entra un sudor frío y tengo ganas de dirigirme directamente al encuestador y decirle: Sí, lo confieso, segundo término, escuchar, angustia; ¿dónde tengo que firmar?.

miércoles, 12 de marzo de 2008

Talento escondido

Es muy posible que ahora mismo estén rodando una película en, digamos, la República Checa, o puede que Nueva Jersey o en China. Un hombre (o mujer) joven con talento ha escrito un buen guión lleno de personajes plausibles y diálogos inteligentes y lo está plasmando en imágenes bien encuadradas, con la luz adecuada y en los escenarios pertinentes. Una película que muy posiblemente nos gustaría ver porque nos hablará de nosotros mismos, de nuestros miedos y nuestras valentías, hablará de la vida. Sin embargo lo más probable es que nunca la veamos. Porque la están haciendo muy lejos de aquí, porque quizás no se estrene ni en su país, porque no nos enteraremos nunca de su existencia, porque se hacen tantas películas... Y porque si una mariposa aletea en la selva amazónica la posibilidad de que un tsunami asole las costas de Japón es ciertamente remota (aunque no inexistente).

martes, 11 de marzo de 2008

Traicionado

Me pasa a menudo que en un primer vistazo creo leer cosas que no están escritas. Hojeando el periódico leo: "Llega un nuevo fraude". ¡Cómo está el mundo!. Mentiras, engaños, fraudes... es la naturaleza humana, como la del escorpión. Pero espera, no pone eso. Lo que pone es: "Llega un nuevo frente". Es la página del tiempo, y lo que llega es un nuevo frente frío, lluvia, bajas temperaturas, mal tiempo. Nada que podamos achacar a la naturaleza humana. Fraude, frente, puedo explicar el error. Intentarlo, digo. Tres letras iguales; las dos primeras, f y r, y la última, e. Y las tres de en medio con cierto parecido: La a y la u son como una e y una n cabeza abajo y la d y la t ambas sobresalen sobre el texto. No cuela, vale. Lo que he creído ver es lo que he querido ver. Lo que mi mente tenía preparado para mí: Fraude. No estoy orgulloso, ojalá hubiera leído algo más positivo, algo optimista, algo que me hubiera delatado como un hombre feliz. Pero he leído fraude. Algo huele a podrido en Dinamarca, etc.

En traje de baño

Cuando alguien dice que la vida son dos días y uno lloviendo siempre me viene a la memoria otra frase hecha, la de que no somos nada y menos en calzoncillos. O en traje de baño, y me acuerdo de aquella tira cómica de Mafalda, cuando están de vacaciones en la playa y el padre (a mí se me hace raro decir papá) de Mafalda está en plan compadre con otro tipo y se da cuenta de pronto de que el otro está muy por encima en la escala social, aunque no se le notaba en traje de baño. O sea que aunque a simple vista no se noten, diferencias haylas, y Mafalda, que está haciendo un flan de arena y parece que no se entera, está procesando todo, como suelen hacer los niños, y seguramente dice, o piensa, algo así como "¡la pucha!".

domingo, 9 de marzo de 2008

Tardes de domingo sin ti

Domingo, maldito domingo, y se pasa tan rápido. Las tardes del domingo estuvieron llenas de melancolía, porque al día siguiente había que ir a clase, o a trabajar, y porque yo no tenía novia. Porque salía del cine y aún quedaban horas de tarde de domingo, atardeceres rojos, y no me iba a poner a estudiar. Lo que deseaba, sin saberlo, era un amor tipo domingo (a sunday kind of love).

sábado, 8 de marzo de 2008

Montaigne

Montaigne dijo: "¡Buena almohada la duda para una cabeza bien equilibrada!". Yo la equilibro con un taco en una de sus patas (de las patas que sostienen mi cabeza, en sentido figurado) y también dudo. No hace falta leer a Montaigne para citarle (ni para dudar). Ni tan siquiera hace falta saber quien fue. Un francés, en eso no dudo. Un francés rico. Por eso tuvo el tiempo y el cuajo para ponerse a pensar y a escribir sus pensamientos. Un blog escrito a mano y con tinta. Pidiendo "recado de escribir", que me imagino que consistía en unas hojas de papel, un tintero una pluma, un secante... Montaigne en su torre leyendo a los clásicos en latín. También escribió: "Encuentro tanta diferencia entre yo y yo mismo como entre yo y los demás". Eso él, que meditó tanto. Yo me encuentro sospechosamente semejante a mí mismo y a los demás. Pero dudo, eso sí.

jueves, 6 de marzo de 2008

Pelo

Tengo el pelo rizado. En cuanto crece un par de centímetros se ondula irremediablemente. Y en su momento, como buen adolescente, sufrí por ello. Yo quería tenerlo liso. Me peinaba con raya y dormía sobre el flequillo para intentar alisarlo. Una vez en clase, el del pupitre de detrás me dijo que tenía el pelo como el de las estatuas griegas. No me pareció mal la comparación, porque las estatuas también transmitían belleza e inteligencia (descarto que les hicieran estatuas a los tontos de la época). Pero aún así hubiera preferido mil veces una media melena de pelo liso, puede que vestido de negro. Un héroe romántico. Ahora me doy cuenta de mi error. El pelo rizado hubiera servido perfectamente para mis fines (confesables o inconfesables), lo que no servía era mi inseguridad. También ahora me doy cuenta de que no por tener el pelo liso era más feliz ninguno de mis compañeros. Cada uno se arregla muy bien para tener sus propios complejos independientemente de los dones que le haya regalado la naturaleza. En cuanto al pelo, el único requisito que debe cumplir es la limpieza. Eso y saber sonreir. ¿Habré madurado?.

miércoles, 5 de marzo de 2008

Correo basura

Me están llegando correos basura en los que Pat, o Mike, o Cynthia declaran que quieren ser fans míos. Cosa sorprendente ya que no les conozco de nada y además ser fan mío es un subconjunto vacío del conjunto de gente corriente. A veces en estos correos facilitan una dirección donde supuestamente se encargarán de que no te manden más esa correspondencia no deseada. Buscando esa dirección he abierto uno y me he encontrado con la pregunta (de Cynthia): ¿Darías la mano a George Bush?. Dos grandes cuadrados enmarcaban el "sí" y el "no". Me he sentido acosado. Otro listo ha comenzado otra clasificación de los humanos. Los que darían la mano a George Bush, y los que no se la darían. Y quien sabe, igual es una trampa. Si elijo el "no" puede que ingrese directamente en la lista negra de la CIA y sea declarado persona non grata en los Estados Unidos. Si elijo el "sí", la lista donde me integrarán es la de los papanatas sin criterio que se dejan deslumbrar por el poder, sin distinguir que George Bush no deja de ser un hombre normal que una vez a poco se axfisia comiendo una galletita. El caso es que no me encuentro cómodo en ninguna de las dos opciones. No tengo mayores razones para darle o no la mano a George Bush, así que mejor me quedo en la categoría humana donde ya me encontraba antes sin darme cuenta: La de los que nunca tendrán ocasión de dar o dejar de dar la mano a George Bush.
En cuanto a Cynthia, el clic lo hice en "cerrar ventana".

martes, 4 de marzo de 2008

Cuadros de una exposición

Estuve viendo los cuadros de una exposición. Rincones de una casa: Plantas en una ventana, un piano con unas partituras, la mesa de la cocina cubierta de verduras, el contador del gas. Había uno con una pila de libros sobre una mesita. Estudié cuidadosamente los lomos, pero no se distinguían las palabras. Vistos de lejos parecían verse las letras, pero te acercabas y resultaban ser manchas borrosas. No aparecía ninguna persona en los cuadros. Lo más difícil de pintar son las caras de la gente, supongo (hay un pintor que sólo pinta gente de espaldas). Mirando los cuadros iba construyendo una casa antigua, llena de calma, de suelos encerados, de escaleras añosas e irregulares. Seguramente fuera llovía mansamente.

lunes, 3 de marzo de 2008

Palabra con cuerno

Veo las palabras como animales pastando en la sabana africana. Las palabras son herbívoras. Las veo desde un helicóptero y si descendemos para posarnos y ver alguna de cerca, salen todas de estampida asustadas por el ruido del motor y el vendaval que levantan las aspas. Las palabras gacela, siendo las más hermosas (al menos vistas de lejos), son las más huidizas y las más rápidas y sólo las adivino saltando armoniosamente sobre troncos caídos en la lejanía. También veo palabras cebra y palabras ñu, que son francamente rápidas; y palabras elefante y palabras jirafa que se mueven a cuarenta kilómetros por hora de velocidad punta, muy poco para un ferrari pero bastante rápido para un lector lento como yo. Y están también las palabras rinoceronte, que no es que tú las veas, es que ellas te ven a ti. Y, amigo, no puedes ignorar a una palabra rinoceronte. Mejor busca el árbol escalable más próximo. Y me he encontrado esta palabra rinoceronte: Heuristic. Me la he encontrado así, disfrazada de dama del grupo de Bloomsbury. En castellano es heurístico, palabra conocida de vista, pero cuyo significado se empeña en huir de mi mente. Me suena mucho tu cara, pero no te ubico heurístico. Repaso tu filiación y comprendo vagamente que te refieres a descubrir algo, a tantear, a deducir, a intuir, a explorar. Sí, algo hay de eso, pero a buen seguro que en el plazo de muy pocos días me dejarás la osamenta de tus letras vacías y tu espíritu huirá con las gacelas Thompson veloz por la sabana interminable.

domingo, 2 de marzo de 2008

Marca de nacimiento

Conviene cada poco tiempo volver a las verdades básicas (verdades que me encantaría conocer, sí). Quiero decir que siempre existe el peligro de creernos más de lo que somos. Y somos poca cosa y para conseguir ser algo hay que trabajarlo. "El único puesto para el que un hombre está capacitado por el mero hecho de nacer es el de idiota". Joseph Pulitzer lo dijo comentando si el periodista nacía o se hacía. O sea que nadie nace enseñado, todos somos idiotas de nacimiento. Por otra parte un idiota tiene su utilidad; contando una historia con ruido y furia refleja exactamente la vida (esto, como es sabido, es de Shakespeare).

sábado, 1 de marzo de 2008

En el gabinete

Dejé las gafas en la encimera del lavabo para ducharme. Mientras me secaba tanteé con la mano, apreté la montura entre los dedos y sentí un crack. Me las había cargado. Con un trozo de esparadrapo salí del paso al día siguiente y a la tarde acudí a la óptica. Me hicieron pasar al "gabinete de optometría". Estuve un buen rato esperando, así que fui ajustando la altura de la barbilla en los aparatos y curioseando los diplomas. Localicé en la orla universitaria a la titular del establecimiento con veintitres años. Luego había redondeado su preparación con un par de cursillos en la universidad de Pennsylvania. Había también un poster con imágenes del fondo del ojo con distintas patologías: Retinosis pigmentaria, cataratas y otras lindezas. Echaba para atrás. Incluso el fondo del ojo que aparecía como "normal" era un círculo rojizo con algunas ramificaciones de un aspecto repulsivo. Me atendieron por fin. Puse la barbilla y apoyé la frente en los lugares previstos. La buena noticia: La tensión ocular la tengo perfecta.