jueves, 15 de febrero de 2007

Sin solución

Hay problemas que no admiten solución, solo su disolución. Es una variante del sistema de resolución de problemas consistente en dejar que se pudran. Con juego de palabras. Lo he leído en un artículo de Miguel Escudero. Estoy en paz con este señor: Yo no le conozco y él no me conoce a mí. Es broma.

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