¿Y por qué no un haiku? Veo una película neozelandesa y a un huérfano le dicen que para sublimar lo que le reconcome escriba haikus. Y los escribe, y le salen expresivos, infantiles, humorísticos. Así que supongo que yo también puedo escribir alguno. Me pongo en el lugar de ese u otro niño y escribo.
.
Voy a la escuela
la clase es larga
breve el recreo.
Me pongo en mi lugar y escribo otro.
Tecleo un haiku
un aliento de poesía
sopla en mi cara
Voy cogiendo confianza. No tengo ni idea de haikus y de momento no quiero aprender para no coartar mi libertad de expresión. Tampoco me voy a poner a contar las sílabas. Puede que estos no sean ni haikus. Sublimo.
Pasan los días
las nubes, los pájaros
la ausencia duele.
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