lunes, 5 de marzo de 2007

La existencia de Dios y una contradicción.

El hombre es un animal básicamente contradictorio. Ejemplo.
De pequeño, criado en una familia religiosa, en una sociedad religiosa, creía en Dios. Recuerdo que me prometía a mí mismo nunca robar ni, santo cielo, matar para así no perderme el cielo. No era consciente entonces del pecado de la carne..
Llegó una segunda fase, cuando me dí cuenta de que no sabía. No tenía ni idea. Puede que Dios existiera o puede que no. Por mi parte respetaba a creyentes y agnósticos y deseaba que sí existiera porque así mi alma viviría eternamente.
Y hete aquí que hace relativamente poco he pasado a una tercera fase. He llegado a la conclusión de que no soy quien para opinar. Lo que yo pueda elucubrar es irrelevante. La pregunta me supera.
Y ésta es la contradicción; si pienso que mi opinión no cuenta, ¿por qué la expreso aquí?.

No hay comentarios: