jueves, 15 de diciembre de 2022

Un día en la feria

    Podría haber sido una de los Hermanos Marx pero no, es un día en la feria del libro, en la liburu azoka. Me paso todos los años; desde el portal de mi casa al pabellón habrá unos trescientos metros, lo tengo fácil. Fui a las dos de la tarde, pensando que a esa hora, la de comer, habría menos gente. Timorato de mí llevaba mascarilla, y eso que estoy supervacunado. No vi absolutamente ninguna más. Pensé que en cualquier momento dirían algo por megafonía a cuenta de “el tipo de la mascarilla”.
    Mi compromiso con la feria consiste en comprar un libro al año. Tenía uno en mente, uno recomendado por otra escritora. Tuve que preguntar, no figuraba entre las novedades ya que su editorial no ha tenido stand y solo estaba disponible a través de otra casa que lo distribuye. Qué me costará decir el título, pero no quiero hacerlo por si luego no me gusta. Si está interesado el amable lector encontrará pronto noticia del mismo en mi otro blog “Voy cruzando el río” (qué bien me ha quedado esta frase).
    Compré el libro, hojeé otros muchos y vi a tres personas conocidas. Esto de ver conocidos se dice mucho y es cierto, es inevitable encontrarse con alguien. Pasé por el puesto de publicaciones locales para confirmar que estaba mi libro (El tiempo, la ausencia, de hace tres años). El año pasado se vendió un ejemplar, a ver este. Por allí andaba I pero no hablé con él porque es un esaborío que no sé por qué cuando nos cruzamos por la calle me saluda escueto y serio. Así que como él no se dio cuenta, o se dio, no sé, seguí a lo mío como si nada.
    La sorpresa fue encontrarme a J atendiendo otro stand. J fue vecino nuestro aunque desde hace unos años ya no lo es. Compré allí un calendario con fotos antiguas, cinco euros, e intercambiamos algunas amabilidades. Ya me iba cuando apareció R, el tercer conocido, compañero de trabajo como I, aunque más cercano y ahora sí, nos sonreímos y charlamos un rato.
    Esto ha sido un día en la feria, un episodio más de mi autobiografía sin acontecimientos (como no me canso de decir que dijo Pessoa).

No hay comentarios: