sábado, 6 de agosto de 2022

Gracias Gramsci

    Antonio Gramsci. Seguro que hay una norma del buen escritor que recomienda no empezar nunca con un nombre propio. También habrá otra que aconseje lanzarlo como gancho para atrapar al lector. En todo caso, Antonio Gramsci. Poco sabía de él, apenas que fue un comunista o un filósofo o un filósofo comunista. Y que era italiano.
    De lo mucho que dejó escrito lo ignoro todo menos esta frase que citan en un periódico: Para afrontar el pesimismo de la inteligencia hay que echar mano del optimismo de la voluntad. El peinado de la cita es mío. Me ha reconfortado leerla porque es más o menos lo que dije, o quise decir, hace unos días aquí mismo.
    La idea me causaba cierta inquietud, no veía del todo claro que fuera lícito, por decirlo de algún modo, obviar el panorama desolador que nos dicta (o me dicta) la mente y decidir que la vida es mejor con chocolate, que la vida es mejor si así lo decidimos porque nos conviene y damos esquinazo a la depresión (por suerte no soy propenso).
    Ha sido un alivio leer que Gramsci pensaba lo mismo y de alguna manera respalda mi opinión. Pero él lo dijo antes, así que he debido de ser yo el que ha respaldado la suya. Aunque yo no lo sabía. Es un poco lío.

No hay comentarios: