martes, 8 de abril de 2008

A través del espejo

Casi siempre le veo de refilón, en el baño, en el ascensor. A mi imagen en el espejo. Es un tipo parecido a mí, aunque más viejo. Será porque la imagen mental de mí mismo se quedó años rezagada y la réplica ante el espejo me la da ahora otro que cada vez se me parece menos. Vengo observando que levanta más una ceja que la otra. La derecha concretamente. Todo indica que yo hago lo propio con la izquierda; si me concentro puedo sentirla más alta que la derecha en gesto de perpetuo semi-asombro. Una vez me llamó la atención una fotografía publicitaria de un rostro. Había algo extraño. Al cabo de un rato me di cuenta de que aquella cara era absolutamente simétrica y quizás por eso no parecía natural (en Blade Runner podían haber reconocido a los replicantes por esta particularidad). Así que si alzo la ceja izquierda (nada exagerado, espero) es que soy humano.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Curioso, a mi me pasa lo mismo, veo delante del espejo una chica adolescente...(¿Será que mi mente sigue allí? JAJAJAJAJAJ)